Uno cumplió, el otro zafó, pero los dos terminaron igual de felices. Alemania porque ganó (1-0) y pasó primera de su grupo a octavos, y Estados Unidos porque logró ser segundo por diferencia de gol con Portugal y también pudo estirar su estadía en Brasil.

Es el análisis el que marca la diferencia entre dos selecciones que cumplieron con las primeras expectativas que tuvieron desde un principio. Es que pese a lo ajustado del resultado, el equipo de Joachim Löw no dejó dudas de su superioridad y rubricó su candidatura para seguir peleando bien arriba en suelo carioca. Si alguien aún duda de tremendo potencial debería ver una y otra vez el gol con el que Thomas Müller inclinó la balanza.

El delantero (ahora goleador junto con Messi y Neymar) tomó un rebote afuera del área y le dio... Pero no así nomas, porque no fue sólo una bomba lo suyo: en el combo incluyó puntería, como para demostrar que también puede haber sutileza en un tremendo golazo.

Estados Unidos no pudo igualar la definición, pero ya se había conformado con el respiro que le dio la calculadora de este Grupo G, el que por los números pudo ser para cualquiera, pero que resultó para alemanes y norteamericanos.