Muy temprano nos despertó nuestro enviado especial en Brasil, Guillermo Monti. Hace base en Belo Horizonte, pero ayer se había trasladado hasta Río de Janeiro para empezar a cubrir las alternativas del partido debut de la selección Argentina, que será hoy ante Bosnia en el mítico Maracaná. Por una confusión en las reservas, el hotel donde debía alojarse estaba en una playa paradisíaca, pero a ¡170 kilómetros del estadio! Todo un problema, sobre todo porque los alojamientos en Brasil están absolutamente desbordados. La redacción empezó a mover los hilos durante toda la mañana y se barajaron varias posibilidades, incluso que se hospedara en un departamento alquilado por unos tucumanos conocidos. Finalmente, al mediodía conseguimos un hotel, de bastante menos categoría, pero cerca del Maracaná. Ahora sí, respiramos todos aliviados y continuamos el día con tranquilidad.