u UN MONTERIZO TRAS la gobernación.- Regino Amado será quizá el menos favorecido si Juan Manzur, ministro de Salud de la Nación, abandona el gabinete presidencial para retornar a la vicegobernación de Tucumán. Amado, que reemplazó al gobernador todas las veces que fue necesario desde 2009, pasará a ser un legislador más de los 49. Ya no podrá hacerse llamar “vicegobernador” y le será muy difícil volver “a cortar cintas” con la asiduidad del presente. En su entorno afirman que el eventual cambio no lo obligará a bajarse de la trafic oficial, puesto que Amado siente que “jugó bien” como interino. Además, a sus colaboradores comentó, con su eterna sonrisa más amplia que nunca, que tiene el visto bueno para trabajar por un lugar en la fórmula oficial. Manzur, entonces, podría llegar a ser su rival o su complemento -en el mejor de los casos- en una interna en el Partido Justicialista. Por eso Amado repite que es hombre de Alperovich y cultiva buenas relaciones incluso con su vecino de Monteros, Juan Antonio Ruiz Olivares, secretario de la Legislatura y principal lugarteniente del ministro de Salud de la Nación.