BRASILIA.- Las autoridades policiales de Brasil ya habían advertido que tendrán tolerancia cero con los barras argentinos. Ayer, cuando nadie lo esperaba, los miembros de seguridad del vecino país confirmaron que detectaron a dos violentos y que los deportarán en las próximas horas.
El primer detenido se registró en el Aeropuerto Internacional de San Pablo y, aunque no se reveló su identidad, trascendió que se trató de un hincha de Rosario Central.
El otro barra -tampoco se conoció su filiación por cuestiones legales- fue expulsado cuando intentaba ingresar vía terrestre por el paso fronterizo de Uruguayana, estado de Río Grande do Sul, lindante con localidad correntina de Paso de los Libres.
Luis Navajas, jefe de Interpol Brasil, anticipó a medios locales que las fuerzas de seguridad de ese país no permitirán el acceso a ninguno de los 2.100 hinchas que fueron informados por las autoridades de seguridad de Argentina.
Estas medidas se realizarán hasta la finalización de la competencia, el 13 de julio en Río de Janeiro. Fuentes del área le confirmaron que la policía brasileña espera para el jueves el grueso de los barras con intenciones de ingresar al país, a tres días del debut de Argentina frente a Bosnia en el estadio Maracaná.
Por otra parte, Débora Hambo, abogada de la disuelta Hinchadas Unidas Argentinas, pidió que se dé a conocer la nómina de barras que no pueden ingresar a Brasil para que no ocurran estos incidentes. (Télam y Especial)