BUENOS AIRES.- El vicepresidente de la Nación, Amado Boudou, deberá presentarse hoy, a las 11, en los Tribunales Federales del barrio porteño de Retiro, para ser indagado por el juez federal Ariel Lijo por el denominado ‘caso Ciccone’, donde está acusado de haberse quedado con la empresa para hacer negocios con el Estado aprovechando su cargo de funcionario: ministro de Economía. En el período 2009-2011, Boudou habría incurrido en una maniobra de tráfico de influencias para salvar de la quiebra a la imprenta de billetes Ciccone Calcográfica y dejar la administración de la empresa en manos de supuestos allegados.
Por primera vez en la historia argentina, un vicepresidente será indagado durante su mandato institucional y podría ser también el primero en quedar procesado en una causa penal.
Boudou, que está imputado de realizar negociaciones incompatibles con la función pública, iniciará la ronda de interrogatorios a acusados por el caso de la ex imprenta, por el que serán indagadas otras cinco personas, entre ellas José María Núñez Carmona, socio y amigo del vicepresidente, y Nicolás Ciccone, cofundador de la compañía.
En los últimos días, Boudou estimó que, después de su declaración, el juez Lijo lo procesará.
Nulidad irresuelta
La defensa del vice tiene presentado un pedido de nulidad del llamado a indagatoria, al que el juez Lijo dispuso darle trámite, corriéndole vista a las partes para que opinen antes de resolver. El fiscal Jorge Di Lello tiene tres días para decidir sobre el planteo, y luego la defensa podrá apelarlo si el juez lo rechaza, por lo que el pedido de nulidad estará vigente para la indagatoria de hoy. La ley establece que la declaración indagatoria se puede tomar a pesar de que existan nulidades planteadas.
Boudou había pedido televisar la indagatoria y le ofreció al juez Lijo su despacho del Senado para hacerlo, pero el magistrado rechazó el planteo porque el artículo 204 del Código Procesal Penal establece que el expediente será “secreto para los extraños”.
El vicepresidente fue citado a indagatoria acusado de haberse quedado con la empresa Ciccone para hacer negocios con el Estado, y con la participación de su amigo Núñez Carmona y de Vandenbroele, señalado como ‘testaferro’ del vicepresidente y titular del fondo de inversión que se quedó con el 70% de Ciccone.
Complicidades
“Amado Boudou, junto a José María Núñez Carmona, habrían adquirido la empresa quebrada y monopólica Ciccone Calcográfica, mientras Boudou era ministro de Economía, a través de la sociedad The Old Fund y de Alejandro Vandenbroele, con el fin último de contratar, con el Estado nacional, la impresión de billetes y documentación oficial”, sostuvo Lijo en el llamado a indagatoria.
Agregó que Boudou se reunió con la familia Ciccone para hacer el traspaso de la compañía a “The Old Fund”, que después delegó las negociaciones en Núñez Carmona y que Rafael Resnick Brenner (funcionario de la AFIP) firmó un plan de pagos excepcional (por la deuda impositiva que tenía con el fisco) a favor de Ciccone.
Por último, cuando Ciccone pasó a llamarse Compañía de Valores Sudamericana (CVS), firmó con la Casa de Moneda un contrato para la impresión de 410 millones de billetes, ya cuando Boudou era vicepresidente.
Más indagatorias
Junto con Boudou, serán indagados Núñez Carmona (mañana, a las 11); Alejandro Vandenbroele, presidente de “The Old Fund”, la empresa que se quedó con Ciccone (miércoles a las 11); el ex jefe de asesores de la AFIP, Rafael Resnick Brenner (jueves a las 9) el yerno de Nicolás Ciccone, Guillermo Reinwick (jueves a las 11) y el propio Ciccone (viernes a las 11). (DyN)