El gorro, la bandera y vincha no serán suficientes esta vez. Para viajar a Brasil, en caso de que usted vaya a ver el Mundial que comenzará el próximo jueves en Río de Janeiro cuando el local y Croacia jueguen el partido inaugural, tendrá que tener en cuenta muchos más detalles que el cotillón, sin importar que ya tenga entradas en mano.

Alentar a la Selección en su excursión mundialista es casi como jugar al “la búsqueda del tesoro”, pero mucho más costoso que esconder simples regalos en un parque. A ver, si usted, señor lector, ha llegado hasta aquí, significa que ya ha pagado sus pasajes en avión o en colectivo o ya ha preparado a su vehículo para llegar a Río y experimentar (si es que no lo ha vivido ya) que se siente estar en un Mundial, ese evento realizado cada cuatro años.

Además del auto andando, los pasajes y los tickets en mano, necesitará de otros elementos para completar el objetivo. La mayor parte de las obligaciones al viajar se refieren a la documentación por lo que el tema abarcarán casi todos los “mandamientos”. Al ser un país limítrofe y estar fuera del listado de naciones cuyos ciudadanos necesitan visa para entrar, todo será un poco más fácil pero aún así hay que tomar nota. Una identificación es obligatoria y estos son los documentos válidos para ingresar a Brasil, según explícita el consulado brasilero en Buenos Aires en su página web: un pasaporte válido, cédula de identidad emitida por la Policía Federal o el DNI. Por supuesto, tal como explica el consulado, los documentos deben estar en buen estado de conservación y las fotos, reconocibles. Las políticas migratorias en Brasil se han caracterizado por ser muy estrictas y siempre es una firme recomendación de las agencias de viajes.

El Ministerio de Relaciones Exteriores y Culto, sacó una guía práctica online para los fanáticos que viajen y pueden visitarla en https://cancilleria.gov.ar/userfiles/recomendaciones-mundial.pdf.

Allí, explica que en caso de que viaje en auto, además de estas identificaciones, deberá cargar las siguientes, pertenecientes al coche: la licencia de conductor original, la cédula de identificación del auto (”cédula verde”) y el seguro de responsabilidad civil del propietario y/o conductor de vehículos.

Por supuesto, también tendrá que realizarle al vehículo las verificaciones técnicas correspondientes y cumplir con las normas exigidas por la legislación brasileña: matafuegos, cinturón de seguridad y cristales sin rajaduras.

Si usted viajara en el auto de un tercero, además de los requisitos mencionados, deberá tener listo para enseñar en la frontera una autorización para conducir el vehículo por territorio brasileño hecha por el propietario ante Escribano Público y legalizada por el Colegio de Escribanos y por el Ministerio de Relaciones Exteriores o la “cédula azul”, emitida por el Registro de la radicación del auto.

El Ministerio también recomienda, una vez en Brasil, dejar los documentos originales en un lugar seguro y movilizarse con una fotocopia de los mismos. “Aconsejamos además que deje una copia de sus documentos a un familiar o amigo en la Argentina, para que en caso de ser necesario pueda remitirlo por fax o e-mail, y así facilitar la tramitación de un pasaporte provisorio al efecto de regresar al país”, explica un apartado.

“La Ley de la Copa”

Y bien, si supera la fase aduanera, estará más cerca del tesoro, más no del todo. Ya en el estadio, surgen una serie de prohibiciones surgidas de la “Ley de la Copa”, un texto promulgado especialmente para el Mundial por el gobierno brasileño. No pueden llevarse: objetos contundentes, fuegos artificiales o banderas que no sean para “manifestaciones amigables”, entre otras.

Si ha hecho lo que el mapa del tesoro mundialista indicaba, entonces sí, prepárase para disfrutar del oro y el Mundial.