Cristiano Ronaldo fue elegido como el mejor del mundo de 2013, pero como la compulsa de FIFA resultó muy pareja su reconocimiento no es unánime. Por ello, el portugués quiere encabezar a su selección a la primera conquista ecuménica en Brasil y despejar dudas acerca de su reinado en el fútbol.
El combinado de su país no está entre los candidatos, pero la sola presencia de “CR7”, que superó con 27,99 % en la elección a Lionel Messi (24,72 %) y Franck Ribery (23,36 %), basta como para ilusionar a los lusitanos con estrenar su palmarés, pues en los Mundiales solo fue tercero (1966) y cuarto (2006) y en la Eurocopa subcampeón (2004).
El oriundo de Funchal, capital de la isla Madeira perteneciente a Portugal, llega verdaderamente en su mejor momento y tal vez es la estrella con más brillo actual de las que asistirán a la cita de mayor importancia del fútbol de los últimos cuatro años.
Justamente, Messi, Neymar o Andrés Iniesta no vienen de su mejor temporada con Barcelona, y tampoco Bastian Schweinsteiger, Arjen Robben y Ribery con Bayern Munich, por citar a algunas figuras que actuarán en tierras “verdeamarelas”. En cambio, Ronaldo arribará con el título más importante bajo el brazo. Si bien Real Madrid quedó al margen de la Liga de España a pocas fechas del final, lo cierto es que ya había ganado la Copa del Rey en la definición con Barcelona y luego se acreditó la Liga de Campeones de Europa con una tremenda remontada a minutos del cierre y en el suplementario.
El exquisito jugador, de 29 años y 1,85 metros, no se destacó sobremanera, pero igualmente logró decir presente en la red para sellar de penal el 4-1 definitivo (Real igualó 1-1 en el tercer minuto adicionado del tiempo reglamentario) ante Atlético Madrid. Con esta conquista, el también ganador del Balón de Oro en 2008 (después quedó a la sombra de Messi) redondeó un nuevo récord de 17 tantos en una edición de la “Champions”, mientras que a su vez fue el “Pichichi” (goleador) de la Liga con 31 anotaciones y sumó tres en la Copa del Rey.
Con su selección resultó clave con su poder ofensivo para sobresalir cuando realmente fue necesario. En los dos partidos del repechaje para clasificar al Mundial ante Suecia, convirtió el 1-0 en la ida y los tres del 3-2 de la vuelta, como visitante (12 tantos en 13 cotejos esta temporada con Portugal).
El extremo (435 goles en 702 partidos totales) llega a Brasil con una impresionante foja de 15 títulos locales y tres internacionales de sus pasos por Sporting de Lisboa (3 entre su debut en agosto de 2002 y 2003), Manchester United (8 más “Champions” y Mundial de Clubes entre 2003 y 2009) y Real Madrid (4 y la citada Liga de Campeones desde 2009), más infinidad de récords individuales.
Pero la realidad es que aún no pudo cumplir su anhelo de poder regalarle una corona oficial a su país y solo celebró en el Torneo Esperanzas de Toulon 2003 con el Sub 21. En la “Mayor” debutó en la Eurocopa 2004 (2 goles y 2 asistencias) en la mejor actuación de Portugal en la historia (perdió la final con Grecia 1-0).
También en 2006 participó de la formación que alcanzó por segunda vez una semifinal del Mundial, aunque terminaría cuarta (1-3 con Alemania) y “CR7” solo marcó un gol. Después llegaron las frustraciones de la Euro 2008 (1 gol y afuera en cuartos) y la cita de Sudáfrica 2010 (1 y eliminado en octavos).
Tuvo una mejoría en el certamen continental de 2012 con tres tantos pero su equipo no pudo en los penales en semifinales con España. Y por eso, tras los éxitos recientes a nivel de clubes llega envalentonado al Mundial de Brasil con la ilusión de cortar la sequía y quedar verdaderamente en la historia.
Cristiano Ronaldo dos Santos Aveiro, el mismo que superó una afección en el corazón con una operación a los 15 años, buscará asociarse con Nani, Joao Moutinho y compañía en la mitad de la cancha para abastecer a Hugo Almeida o Helder Postiga, según quien decida el DT Paulo Bento en su esquema 4-5-1 ó 4-3-2-1.
En tanto, la defensa muestra seguridad con Pepe, Bruno Alves, Fabio Coentrao y Joao Pereira para cuidar el arco de Rui Patricio, pero la realidad es que Portugal dependerá fundamentalmente de lo que surja de los pies del crack Ronaldo.
Gambeteador, rápido y atrevido, con una pegada fenomenal de media distancia con el balón detenido o en movimiento, que tiene una calidad única para el “mano a mano” y encima cuenta con uno de los mejores “cabezazos” del planeta, afrontará su tercer Mundial y quiere de una vez por todas ser un verdadero protagonista.
El astro quiere trascender por su fútbol en Brasil. Capacidades le sobran, claro está, pero lo quiere demostrar sobre el césped, pues sabe que con el título bajo el brazo ya nadie podrá discutir que es el mejor de todos.