El acoso Sexual a través de las redes sociales o “Grooming”, es el nuevo modus operandi que utilizan los pedófilos para acercarse a sus potenciales víctimas.
Estos individuos se aprovechan de la accesibilidad y poca privacidad de la red y es así como Facebook, Twitter, Messenger, WhatsApp y otros medios para comunicarse se transforman en un gran catálogo abierto para estos perversos.
El grooming habitualmente es un proceso que puede durar semanas o incluso meses, y que suele pasar por las siguientes fases, de manera más o menos rápida según diversas circunstancias. Primero el adulto procede a elaborar lazos emocionales (de amistad) con el menor, normalmente simulando ser otro niño o niña, fingiendo ser “buena onda”, tener empatía o igualdad de intereses con el menor va ganándose la confianza, y es así como el pedófilo va obteniendo datos personales y de contacto del menor. Utilizando tácticas como la seducción, la provocación, el envío de imágenes de contenido pornográfico, consigue finalmente que el menor se desnude o realice actos de naturaleza sexual frente a la webcam o envíe fotografías de igual tipo. Entonces se inicia el ciberacoso, chantajeando a la víctima para obtener cada vez más material pornográfico o tener un encuentro físico con el menor para abusarlo sexualmente siempre bajo la amenaza de mostrarles a sus padres tales imágenes o hacerlas públicas. Es frecuentes que el menor no informe a los adultos de esta situación ya que erróneamente se siente culpable de haber brindado tanta información al acosador, por lo que se hace necesario que padres, madres y miembros del establecimiento escolar puedan detectar la situación y estén atentos a los cambios en el comportamiento de los menores.
Frente a este nuevo peligro sólo queda legislar ante esta nueva forma de delito, prevenir y concientizar a los niños y prepuberes como así también a padres y educadores para que ellos puedan ser las principales vías de aprendizaje para que los menores sean educados en el uso responsable de las nuevas tecnologías, conozcan los riesgos que hay en la red. Y, en el caso de ser víctimas de acoso sexual, reciban la contención que necesitan.