KIEV.- Una semana y media antes de las elecciones presidenciales en Ucrania, los separatistas impusieron un ultimátum al gobierno de Kiev: o retira las tropas o ellos también llevarán a cabo una ofensiva. Mientras tanto, tropas del gobierno volvieron a enfrentarse a los separatistas en el este del país tras el fracaso de una mesa de diálogo celebrada el miércoles. Los combates tuvieron lugar en los bastiones de los rebeldes prorrusos, las ciudades de Slaviansk y Kramatorsk. El secretario general de la OTAN, Anders Fogh Rasmussen, llamó a reforzar la solidaridad al interior de la alianza frente a la “agresión ilegítima e ilegal de Rusia contra Ucrania”.
El Gobierno de Moscú es acusado de apoyar a los separatistas en el sur y este de Ucrania. La OTAN se preocupa por la seguridad de sus miembros, subrayó Rasmussen.
El ministro de Relaciones Exteriores de Alemania, Frank-Walter Steinmeier, se refirió a las elecciones presidenciales en Ucrania el próximo 25 de mayo como “paso decisivo” en el conflicto también con Rusia. “Lo que Ucrania necesita de manera urgente es la construcción de nueva legitimidad y nueva credibilidad”, dijo.
Pero, el jefe de las “fuerzas de autodefensa” en la región de Donetsk, leales a Moscú, le dio plazo al gobierno hasta la medianoche para el repliegue. “En caso que no se retiren las tropas, nuestros militares podrían obligarlos”, enfatizó Miroslav Rudenko.
En tanto, el autodesignado alcalde de la ciudad de Slaviansk, Viacheslav Ponomariov, advirtió a Kiev que en caso de que las tropas no se retiren en un lapso de 24 horas, los activistas “pasarán a la ofensiva”. Quedó abierto cuándo expira el ultimátum. Pero el presidente interino, Alexander Turchinov, rechazó estas amenazas: “La operación seguirá hasta que los combatientes depongan las armas” y admitió que sólo ocurriría el cese de la operación antiterrorista “en caso de que se depongan las armas y se liberen a los secuestrados” en el este del país.
Los medios ucranianos informaron que a primera hora de ayer las unidades del gobierno dispararon contra posiciones de los separatistas en Slaviansk y Kramatorsk. Los prorrusos celebraron un referéndum de autodeterminación no reconocido internacionalmente en el que decidieron separarse de Kiev y proclamar la independencia de las “Repúblicas Populares” de Donetsk y Lugansk, pero el Ministerio de Exteriores ruso dijo no tener “ninguna noticia” del supuesto deseo de unirse a Rusia de las regiones del este de Ucrania.
Desde mediados de abril el gobierno de Kiev lleva a cabo una operación militar contra los hombres armados, que mantienen ocupados numerosos edificios públicos. (DPA-Télam)