ONTARIO, Canadá.- Un accidente producido en esta ciudad dejó como secuela la destrucción casi total de una Ferrari F40, al ser impactada por un Dodge Dart que hizo caso omiso a la luz roja, y giró a la izquierda sin tomar ningún recaudo.

El coche deportivo estaba siendo conducido por un mecánico, que le realizaba una serie de testeos, y que se vio involuntariamente envuelto en un conflicto del que ahora habla el mundo entero.

Cabe destacar que la compañía europea construyó solamente 1.315 unidades de ese modelo, algo que lo convierte en legendario. Por ese motivo, se estima que la compañía de seguros del Dodge deberá desembolsar una millonaria suma.