ESPOO, Finlandia.- Las tablets han copado el mercado, y la competencia se ha vuelto crucial. Las grandes marcas de tecnología luchan por imponerse, con diferentes ofertas de tamaños, modelos y sistemas operativos.
En esta disputa, Nokia asegura que pudo ser pionera, pero que los dirigentes decidieron dar marcha atrás en pleno proceso. Más puntualmente, ocurrió en 2001, cuando la firma comenzó a producir Nokia M510, lo que prometía ser un producto revolucionario.
Incluso, se hicieron mil modelos de este dispositivo, y se puso fecha a la conferencia de presentación, pero finalmente hubo cambio de planes y nunca se concretó.
Esko Yliruusi, uno de los responsables de aquel proyecto, se quedó con una unidad de las producidas, y aclaró que no estaba pensada con fines empresariales, sino que querían enfocarlo al uso familiar y personal, ratificando que se hubiese podido convertir en la primera de la historia.