BRASILIA.- El apoyo a la presidenta Dilma Rousseff está cayendo entre los votantes brasileños, que están cada vez más pesimistas por las perspectivas para la economía del país sudamericano y decepcionados con la gestión de la mandataria, mostró un sondeo. Si bien Rousseff aún está en camino de ganar la reelección el 5 de octubre, ha perdido seis puntos porcentuales entre los posibles votantes desde el mes pasado, según una encuesta de la firma Datafolha.
El sondeo mostró que más brasileños quieren un cambio de rumbo en las políticas del Gobierno y que el doble de los encuestados en relación al sondeo previo considera que el predecesor y mentor de Rousseff, Luiz Inácio Lula da Silva, está mejor calificado que ella para llevar adelante reformas. El número de electores que votaría por Rousseff cayó al 38 % desde el 44 % de febrero, pero sus dos rivales ganaron poco o nada de terreno.
El líder del principal movimiento opositor Aécio Neves mantuvo una intención de voto sin cambios en el 16 % y Eduardo Campos, el gobernador del estado de Pernambuco, avanzó un poco para llegar al 10 %. La única figura que podría llevar a Rousseff a una segunda ronda es la medioambientalista y ex aspirante presidencial Marina Silva, quien se espera que acompañe a Campos en la campaña como candidata a la vicepresidencia.
La mayor economía de América Latina está en un cuarto año de desaceleración, bajo el mandato de Rousseff, quien ha perdido la confianza de los inversores al no conseguir reanimar a la economía ni frenar la escalada de inflación en un contexto de deterioro del panorama fiscal. La agencia Standard and Poor’s redujo el mes pasado la calificación crediticia de Brasil en un escalón dentro del grado de inversión, mencionando la ralentización de la actividad económica y la creciente deuda. La gestión económica de Rousseff y el riesgo de perder las elecciones han generado llamados dentro del gobernante Partido de los Trabajadores y la coalición en favor de un regreso de Lula, que todavía es el político más influyente de Brasil, pero él ha dicho que no volverá a presentarse.
Consultados sobre qué líderes son los mejores para implementar cambios, el 32 % de los entrevistados optó por Lula, el 17 % escogió a Silva, quien fue su ministra del Medio Ambiente, más del 16 % prefirió a Rousseff y un 13 % a Neves. Rousseff sobrevivió a una ola de multitudinarias protestas el año pasado en reclamo por mejores servicios públicos, la corrupción política y el costo de la construcción de estadios para el Mundial de fútbol. Y el nivel de aprobación al Gobierno retrocedió 5 puntos desde el sondeo de febrero. El número de brasileños que cree que Rousseff ha logrado menos de lo esperado avanzó en abril al 63 %. (Reuters)