JUJUY.- Dos guardiacárceles del Servicio Penitenciario de Jujuy negaron haber visto el traslado de siete detenidos, posteriormente desaparecidos, fuera del penal pese a que cubrieron el servicio de guardia el 10 de junio de 1976 y figurar el hecho en los libros internos, quedando uno de ellos detenido por falso testimonio.
Juan Mamaní, quien se desempeñaba como jefe de guardia y Damacio Rodríguez, personal subalterno del Servicio, coincidieron en que los responsables de los detenidos políticos eran los militares, a cuyos jefes desconocían y tanto es así que tenían prohibido hablar con esa gente.
"Nunca vi traslados de detenidos", expresó en su declaración ante el TOF jujeño, sin embargo cuando los fiscales, la querella y los jueces profundizaron el tema se leyeron los libros internos del penal, donde figuran los nombres de los siete detenidos desaparecidos aquel 10 de junio de 1978, y el de los guardiacárceles.
Las víctimas son Dominga Alvarez de Surta, Osvaldo José Garibaldi, María Alicia del Valle Ranzón, los hermanos Juana Francisca Torres Cabrera, Pedro Eduardo Torres Cabrera, Jaime Lara Torres y Jorge Turk Llapur.
En este juicio hay seis imputados por homicidio, secuestros y torturas, cuatro ex guardiacárceles: Carlos Alberto Ortiz, Orlando Ricardo Ortiz, Herminio Zárate y Mario Marcelo Gutiérrez y los ex militares, el oficial de Ejército Antonio Orlando Vargas, condenado a 25 años de prisión en el primer juicio de lesa humanidad y el ex suboficial del Ejército, César Darío Díaz.
Los detenidos desaparecidos habían ingresado al Penal los últimos días del mes de octubres de 1976 y entregados al comisario Ernesto Jaig y al suboficial del Ejército Díaz el 10 de junio de 1976, de los cuales sólo fue recuperado el cuerpo de Alvarez de Surta.
Damacio Rodríguez reconoció haber realizado el asiento con los nombres de las víctimas que fueron sacadas del penal, y relató a los jueces que lo había realizado porque los superiores le enviaron un "memorándum" con los nombres.
"Ellos (por el Ejército) lo manejaban, yo no vi", admitiendo también que cuando efectivos de esa fuerza "cuando entraban al penal estaban encapuchados".
Rodríguez tampoco supo responder cuando el fiscal Francisco Snopek le preguntó por qué no figuraban los nombres de los detenidos que habían salido del penal a la hora de entregar las novedades de la guardia en la que si están los presos comunes, procesados, entre otros a disposición del PEN.
Tanto Mamaní como Rodríguez admitieron saber por "comentarios" que algunos de los imputados en este juicio como los hermanos Carlos y Ricardo Ortiz, Mario Marcelo Gutiérrez, Herminio Zárate, revistaban como "adscriptos" en el Ejército.
En la audiencia de hoy declararon además, otro guardiacárcel y un policía provincial.
Marcelino Reynoso, guardia cárcel, quien dijo no saber si los detenidos políticos eran torturados, ni tampoco quién disponía la salida de los detenidos a fuera el Penal.
Los presos a disposición del PEN "estaban en sus celdas individuales días y noches", comentó.
Simón González, integrante del Comando Radioeléctrico de la Policía dijo no conocer a ninguno de los seis imputados en la causa ni a las víctimas, por lo que se retiró rápidamente del recinto.
Cuando concluyeron los testimonios el abogado querellante Ariel Ruarte, pidió la detención de Juan Mamaní por "falso testimonio", a lo que adhirió el ministerio públicos y los abogados querellantes.
El TOF integrado por Fátima Ruiz López, Daniel Morín, Federico Díaz y como cuarto juez Marcelo Juárez Almaráz pasó a un cuarto intermedio y al retornar al recinto hizo lugar el pedido de detención del testigo ahora imputado.
La próxima audiencia tendrá lugar el 3 de abril próximo y es probable que sea la última de la etapa de debate para dar paso a los alegatos de las partes. (Télam)