KUALA LUMPUR.- La búsqueda por mar y tierra del avión de Malaysia Airlines ya cubre un área del tamaño de Australia. China desplegó 21 satélites para escudriñar su territorio en busca de un avión malasio perdido, mientras que Australia aseguró que lo busca en una extensión de océano del tamaño de España y Portugal.
La policía y las agencias de inteligencia no han podido establecer aún un motivo claro para explicar la desaparición. Los investigadores están convencidos de que alguien con un profundo conocimiento del Boeing 777-200ER y de la navegación comercial desvió la aeronave, con 227 pasajeros -en su mayoría chinos- y 12 tripulantes a bordo, quizás a miles de kilómetros lejos de su trayectoria programada desde Kuala Lumpur a Pekín.
“La idea de una aguja en un pajar sigue siendo una buena analogía”, comentó el administrador de la división de respuesta de emergencia de la Autoridad de Seguridad Marítima Australiana, John Young. El ministro de Transporte y vocero del Gobierno de Malasia, Hishammuddin Hussein, dijo en una rueda de prensa que la búsqueda “sin precedentes” cubre un área de 2,24 millones de millas náuticas (7,68 millones de kilómetros cuadrados), desde Asia Central al sur del Océano Indico.
El vuelo MH370 desapareció de las pantallas de control de tránsito aéreo civiles en la costa este de Malasia menos de una hora después de despegar desde Kuala Lumpur el 8 de marzo.
Los investigadores, que recopilan datos de radares militares y satélites, creen que alguien apagó el transpondedor de identificación y el sistema Acars del avión y que lo desvió hacia el oeste, a través de la Península de Malaca, siguiendo una ruta comercial hacia la India. Funcionarios malasios que han estado reconstruyendo la secuencia de eventos no están seguros de que el Acars haya sido apagado antes o después de que se recibió un mensaje de la cabina, aunque aseguran que no cambia sustancialmente el escenario.
“Esto no cambia en nada nuestra creencia, que ya hemos manifestado, de que hasta el momento en que dejó la cobertura primaria de radares militares los movimientos eran consistentes con una acción deliberada de alguien en el avión”, dijo Hishammuddin. “Esa sigue siendo la posición del equipo investigador”.
Según informaciones de “The New York Times”, el primer cambio de rumbo hacia el oeste fue realizado por un sistema informático. Muy probablemente ese giro fue programado por alguien en la cabina que conocía bien los sistemas de vuelo, reportó este martes el periódico estadounidense citando a altos funcionarios gubernamentales. En lugar de operar manualmente los controles, la dirección de vuelo del MH370 fue ajustada presionando siete u ocho teclas en una computadora ubicada entre el capitán y el copiloto, escribió el diario. Fuentes de seguridad europeas y estadounidenses dijeron que los antecedentes de todos los tripulantes en el vuelo no habían demostrado vínculos con grupos militantes ni nada que pudiera explicar la desaparición de la aeronave. La policía malasia tampoco pudo encontrar señales preocupantes sobre Zaharie Ahmad Shah, el capitán de 53 años, o su copiloto Fariq Abdul Hamid, de 27 años. Los testimonios sobre su vida los muestran como sociables, equilibrados y alegres. Ninguno encaja con el perfil solitario de los extremistas, con un motivo para suicidarse o secuestrar un avión. Reuters-especial)
En China descartaron un secuestro
KUALA LUMPUR.- El embajador chino en Malasia, Huang Huikang, afirmó que no hay prueba alguna que sustente que los pasajeros chinos que viajaban en el vuelo de Malaysia Airlines desaparecido hace más de una semana hayan participado en un secuestro o en un ataque contra el avión. Detalló que las autoridades chinas realizaron una investigación sobre los perfiles de los pasajeros de nacionalidad china a bordo del avión que los llevó a descartar dicha posibilidad. Las sospechas de secuestro o sabotaje se intensificaron después de que las autoridades dijeran que el último mensaje de radio desde el avión -un informal “todo bien, buenas noches”- fue pronunciado después de que el sistema de seguimiento automático, conocido como Acars, fuera apagado.
En Pekín, un grupo de familiares de los pasajeros chinos amenazó con iniciar una huelga de hambre si la compañía aérea no les facilita más información sobre lo ocurrido. Entre las 239 pasajeros que iban en el vuelo, había 153 ciudadanos chinos. “¡Necesitamos conocer la verdad; no vamos a doblegarnos ante la política!”, decía una pancarta enarbolada por una mujer desesperada en un encuentro con delegados de la empresa. Los familiares consideran totalmente insuficiente la información proporcionada por la compañía aérea. (Télam-DPA)
El viaje “escondido” en una “sombra”
KUALA LUMPUR-PEKIN. Entre las últimas hipótesis respecto de lo que pudo ocurrir con el vuelo, toma fuerza la opinión de un experto en navegación aeronáutica, Keith Ledgerwood, quien planteó que el avión pudo utilizar la “sombra” o la vía de navegación reservada por otro vuelo para desviar su rumbo. El experto sugirió que la nave “se escondió” en la ruta de otro avión del mismo modelo y fabricante para pasar desapercibido.
La ruta que habría utilizado habría sido la de un avión de Singapore Airlines que cubre la ruta entre Singapur y Barcelona. El MH370 podría haber recorrido así unos 4.000 kilómetros, y encontrarse actualmente en territorio indio o en Afganistán, según esta versión.
Los investigadores se han centrado también en un posible acto de sabotaje o secuestro por parte de alguno de los miembros de la tripulación o del pasaje. Entre los pasajeros está un ingeniero de vuelo, Mohd Khairul, un malasio de 29 años quien publicó en las redes sociales que había trabajado para una compañía suiza de vuelos chárter. Un ingeniero de vuelo es el responsable de supervisar los sistemas de una aeronave durante el viaje para verificar que funcionan de forma correcta y hacer reparaciones si hacen falta. Están investigando a cualquier pasajero que pueda tener conocimiento de aviación. (Especial)