BUENOS AIRES.- El líder del Frente Renovador, Sergio Massa, sumó en las últimas horas nuevas críticas de parte de referentes políticos y jurídicos por su anticipado rechazo al proyecto para renovar el Código Penal, elaborado por una comisión plural de juristas y legisladores, que el oficialismo impulsará este año en el Congreso.
El PRO y el FAP cuestionaron la negativa de Massa para que el Parlamento analice una reforma al Código Penal, en línea con lo anunciado por la presidenta, Cristina Fernández, ante la Asamblea Legislativa del sábado.
La iniciativa del oficialismo tendrá como punto de partida un proyecto de ley elaborado tres años atrás por el ex diputado y actual ministro de Seguridad y Justicia de Río Negro, Oscar Albrieu, que contó en su momento con el respaldo de 200 jueces federales y la venia de todos los bloques en el marco de la comisión de Legislación Penal de la Cámara Baja.
En los próximos días el Gobierno enviará al Parlamento el anteproyecto, que podría incluir nuevos cambios y que, para convertirse en ley, deberá atravesar los debates en comisiones y en los recintos de ambas cámaras.
Apenas conocida la intención del Ejecutivo, el massismo lanzó una embestida contra la propuesta oficial, denunció que la reforma beneficiaría a los delincuentes con reducciones de penas y adelantó su intención de convocar a una consulta popular sobre la cuestión.
Diferencias
Desde el Frente Amplio Progresista (FAP), su líder y diputado nacional, Hermes Binner, llamó a “ver integralmente” la reforma, y destacó el hecho de que la iniciativa “obligue a debatir los principales peligros”. “La pena tiene que ser racional al tema cometido, algo que también exige debate; nosotros no estamos por rebajar las penas, estamos por ver la gravedad de las penas”, afirmó.
Por su parte, el jefe del bloque de diputados nacionales del PRO, Federico Pinedo, juzgó que “en lugar de oponerse hay que hacer el trabajo lo mejor posible”, y argumentó que los legisladores deben presentar propuestas “para que el Código Penal sea mejor”. “Rechazar una reforma es lo mismo que decir ‘no estoy en condiciones o no estoy capacitado para mejorar la legislación’”, insistió Pinedo.
La comisión de especialistas que elaboró el proyecto presentado a la Presidenta el 13 de febrero, entendió que “lo que hay que sancionar es un nuevo Código Penal con un consenso enorme”.
Las únicas voces que se alzaron en apoyo a Massa fueron las del cobismo y la del ex presidente Eduardo Duhalde, quien definió como un “absurdo” analizar en este momento la reforma del código, y dijo que el tema central “es la inseguridad”.
El ex intendente de Tigre, en cambio, buscó despegarse del apoyo de Duhalde, aunque insistió con sus críticas a la iniciativa oficial y anunció que lanzará una página web “con videos y datos de los cambios del nuevo Código”. “Trato de hablar del futuro, no del pasado”, respondió el líder del Frente Renovador, consultado por los dichos de Duhalde, para quien el mejor proyecto lo tiene Massa”.
Los diputados nacionales del radicalismo mendocino, encolumnados detrás de Julio Cobos, se alinearon con Massa por considerar que el anteproyecto “disminuye las escalas penales de los delitos de homicidio, robos, trata de personas y tráfico de estupefacientes, entre otros”.
Del ámbito judicial
Con todo, las críticas al ex intendente de Tigre llegaron también en las últimas horas desde el ámbito jurídico. El ministro de la Corte Suprema de Justicia, Eugenio Zaffaroni, calificó de “ridículo” al líder del FR y le recomendó “estudiar un poco”.
“La excarcelación es una cuestión procesal, no del Código Penal; el código no regula la excarcelación ni regula la prisión preventiva”, argumentó Zaffaroni, en respuesta a las denuncias del massismo en cuanto a que la reforma busca alivianar las penas para los delincuentes.
Además, remarcó que “no se puede hacer un plebiscito para una cuestión penal” y le sugirió a Massa “que vuelva a la Facultad de Derecho”.
El constitucionalista y ex diputado radical Ricardo Gil Lavedra, quien también integró la comisión que elaboró el proyecto, pidió “evitar hacer política partidista” con la discusión, y entendió que el llamado a consulta popular formulado por Massa “es un claro ejemplo de oportunismo demagógico”. (Télam)