“Nos vemos en la necesidad de advertir a los padres que no se dejen sorprender en su buena fe. El colegio San Antonio de Padua no está facultado para seguir matriculando, porque no está autorizado para seguir funcionando”, dijo ayer Teresa de Ramayo, titular del Sindicato de los Educadores Privados (Sadop.

La dirigente afirmó que el establecimiento fue clausurado en diciembre por el Ministerio de Educación, luego de que se detectaran numerosas irregularidades en su funcionamiento, en particular deficiencias edilicias. Efectivamente, el decreto 1.591 del 16 de diciembre de 2013 resuelve “disponer la caducidad de la incorporación a la Enseñanza Oficial de la Provincia del colegio “San Antonio de Padua”, establecimiento de Enseñanza Pública de Gestión Privada dependiente del Ministerio de Educación, por incumplimiento a lo dispuesto por el artículo 73 del decreto 2191/14. “Pero no sólo incumplieron con las cuestiones edilicias, sino con cuestiones pedagógicas, entre ellas la superpoblación de chicos con capacidades especiales, sin el refuerzo de apoyo docente correspondiente”, dijo Ramayo.