“Los policías de Córdoba se equivocaron al detener a Máximo Arreyes, porque en diciembre ya se había levantado el pedido de captura en su contra”, afirmó el abogado Roberto Flores, defensor del hombre que se había fugado en enero de 2001 del penal de Villa Urquiza.
Arreyes fue detenido el lunes en Río Cuarto, cuando estaba realizando unos trámites acompañado por dos hombres que serían familiares. Un ex policía lo reconoció, ya que el hombre había participado de numerosos robos en esa provincia. En Tucumán había sido detenido en 2000 por el asalto comando al cajero automático de un hipermercado ubicado en el acceso norte.
Flores comentó que de esa causa había quedado desvinculado, ya que el entonces juez de Instrucción Eudoro Albo (hoy camarista de Apelaciones en lo Penal) había dispuesto la nulidad de la causa por la pésima instrucción policial. “Pero seguía pendiente una acusación de la Justicia Federal por transporte de estupefacientes”, agregó el abogado.
Fue durante ese período de detención en el que se produjo la fuga del penal de Villa Urquiza, por la que fueron separados 17 empleados del Servicio Penitenciario Provincial. Además, los entonces directores del penal (Noé Medina y Miguel Ángel Chaile) presentaron su renuncia.
En Mallorca
Luego de escapar de Villa Urquiza, Arreyes se refugió en distintos países de Latinoamérica, como Paraguay y Brasil, según comentó Flores. Finalmente se estableció en Mallorca, España, donde reside un familiar.
En diciembre del año pasado, el Tribunal Oral Federal de Tucumán (TOF) hizo lugar al pedido del defensor de Arreyes y otorgó la eximición de prisión, previo pago de una fianza real de $ 30.000. La resolución fue confirmada por fuentes del Poder Judicial Federal, y fue tomada por los jueces Gabriel Casas y Enrique Jiménez Montilla, con el voto en disidencia de Alicia Noli.
La decisión implicó el levantamiento del pedido de captura que pesaba sobre Arreyes, y la respectiva notificación a las distintas fuerzas de seguridad. A pesar de ello, el ex prófugo tuvo problemas en el aeropuerto de Madrid y debió intervenir la Embajada Argentina para que pudiera viajar al país, comentó Flores.
El miércoles de la semana pasada, Arreyes estuvo en Tucumán cumpliendo todos los pasos procesales en el TOF, y queda pendiente de resolución el pedido de sobreseimiento por prescripción. Luego viajó a Córdoba, de donde es oriundo.
Fue entonces cuando se produjo la detención. Sus abogados notificaron a la Policía cordobesa del cese del pedido de captura, pero como Arreyes habría tenido una pistola, lo acusaron por portación ilegal de arma de fuego y quedó alojado en una dependencia de máxima seguridad.