Acaso no lo perciba el gran público, pero con la muerte del profesor Teodoro Ricardo Ricci la disciplina geográfica de Tucumán ha perdido una de sus figuras más destacadas. En la Facultad de Filosofía y Letras de la UNT se graduó como profesor de Historia y Geografía, y ejerció la docencia en esa casa –de la que fue decano en 1980- durante toda su vida. Fue allí profesor titular de Geografía de América y director del Departamento de Geografía.

En la larga lista de instituciones a las que acercó su eficaz aporte, destaco que integró como miembro fundador de número la Junta de Estudios Históricos de Tucumán y que presidió la filial local de la Sociedad Argentina de Estudios Geográficos. Actuó con lucimiento en decenas de congresos nacionales e internacionales.

Es de gran importancia su obra publicada de investigador concienzudo y prestigioso. “Evolución de la ciudad de San Miguel de Tucumán”, “El ingenio como unidad formal y funcional dentro del paisaje de caña de azúcar de Tucumán”, “Desarrollo regional e integración nacional”, son sólo algunos títulos de una vasta producción. Dedicó a la actividad azucarera penetrantes estudios.

Su “Geografía de Tucumán”, en conjunto con Selva Santillán de Andrés, obtuvo el Premio “Francisco P. Moreno” de la Sociedad Argentina de Estudios Geográficos. Entre otros muchos y sólidos trabajos en colaboración, cito “La cuenca de Tapia-Trancas” y “La región de las sierras del Nordeste de la Provincia de Tucumán”.

Era un hombre de trato encantador y de enorme generosidad personal. Quienes tuvimos el honor de conocerlo y de cultivar su amistad, no lo hemos de olvidar.