MAR DEL PLATA. Exultante tras haberle dado el primer punto a la Argentina con su triunfo sobre el italiano Andreas Seppi, Carlos Berlocq admitió que cuando la gente le grita “Gladiador” lo fortalece y que el aliento fue clave para conseguir la victoria.

“Que me griten Gladiador me fortalece, cuando perdí el set inicial y le gente comenzó a alentarme, saqué muchísima fuerza y me propuse ganar el partido”, comentó el tenista nacido en Chascomús, instantes después de haber vencido a Seppi por 4-6, 6-0, 6-2 y 6-1 en 2 horas y 36 minutos de juego.

“Salí dispuesto a dar el máximo, como siempre, y pude cambiar a tiempo un comienzo adverso. Realmente disfruté mucho el partido y la victoria, porque fueron muchos años de esfuerzo para estar acá y nunca sé si es la última vez que juego en la Davis, así que aprovecho cada instante”, añadió un Berlcoq emocionado. El tenista le dedicó el triunfo a todo el equipo argentino, al cordobés David Nalbandian que se acercó a alentarlo y en especial a su esposa María Noel, quien dentro de 15 días dará a luz su segundo hijo.

Por su parte, el derrotado italiano Seppi, explicó que la cancha fue demasiado lenta para su juego, más apto para superficies rápidas.

“Mis golpes son planos y las pelotas y las canchas lentas no me favorecen. Mi juego es más apto para las superficies rápidas”, comentó Seppi en la rueda de prensa posterior a la derrota que sufrió contra Berlocq.

Seppi destacó finalmente que Berlocq fue un justo vencedor y no puso excusas, “Charly empezó jugando corto y yo pude atacar, pero después el mejoró mucho su juego y me superó bien”, concluyó Seppi, de una imponente altura de 1,90 metro. (Especial)