Parecía la fila para realizar algún trámite en la Anses, pero no. Una multitud de personas armadas de paciencia y tranquilidad esperaba, pese al sopor trajinante de Junín primera cuadra, para poder ingresar al Centro de Atención al Usuario (CAU, Junín 58) y hacerse con la Tarjeta Ciudadana.

Hoy es el último día en que se podrá viajar en alguna de las 14 líneas urbanas pagando con un cospel. A partir de mañana, luego de 25 años, las fichas plateadas serán sustituidas definitivamente por el pago mediante la tarjeta magnética. La fila, que llegó a tener más de 100 personas esperando, se formó porque -según comentó la mayoría- en ese punto de venta nunca faltaban tarjetas o saldo para recargar los plásticos.

Nuevos puntos de venta
Mientras en la city bancaria de la capital se producía esta escena, en un hotel de 25 de Mayo al 200 el director de operaciones para Latinoamérica de la firma Atos (a cargo de la implementación del nuevo sistema), Raúl Toscano, brindaba una conferencia de prensa. Entre otras medidas, Toscano anunció que durante el fin de semana se habilitarán otros 50 puntos de venta y recarga de la tarjeta. Además, y tras recordar la foja de servicios de transporte gestionados tanto dentro como fuera del país, enumeró uno a uno los diferentes plazos de implementación de nuevas medidas y pidió paciencia a los usuarios sobre los diferentes ajustes que deban hacerse.

“Este sistema realiza un enorme aporte a la seguridad, no sólo del chofer, al no tener que manejar cambio ni llevar recaudación en la unidad; sino para el pasajero, que podrá viajar sin crédito con el saldo negativo y recuperar el crédito en caso de robo (con la tarjeta nominal). También se pueden imprimir los últimos boletos desde internet, como comprobante ante cualquier inconveniente legal”, explicó el funcionario de la multinacional. Toscano indicó que, en este momento, se encuentran “afinando” las últimas partes del sistema.

“Un sistema de este estilo obviamente trae aparejado un cambio fuerte de mentalidad y de costumbre del usuario. No es fácil acostumbrarse, por resistencia al cambio y por algunos problemas en la implementación en los que se trabaja”, reflexionó.

Toscano indicó que, al día de hoy, son 194 los puntos de venta habilitados pero que el número sufre alteraciones, con comerciantes que se incorporan a la venta mientras otros dan de baja al servicio.

“Este fin de semana incorporaremos 50 puntos de venta más, por lo que llegaremos a los 250 locales habilitados”, anunció el director de operaciones. Además, informó que desde mañana incorporarán once puntos móviles de venta y recarga en los principales paseos públicos, para medir la demanda de la tarjeta.

En cuanto a las tarjetas precargadas (pueden venderse en comercios sin pósnet) estas entrarán en circulación a lo largo del mes de febrero. El atraso en la venta de este plástico se debe a problemas de aduana, ya que la tarjeta cuenta con insumos importados. Con estas, los puntos de venta, según indicó, superarán los 600.

El saldo negativo (beneficio para los pasajeros que cuenten con la tarjeta nominal), comenzará a regir -según Toscano- desde la semana próxima. Por último, adelantó que en la próxima semana se cerrará el acuerdo para vender la tarjeta en los súper locales y que se trabaja para incorporar 10 puntos de carga automática, con aparatos similares a los cajeros automáticos.