El acuerdo celebrado el lunes entre el Poder Ejecutivo (PE) y los gremios estatales no conformó a los empleados nucleados en el Sindicato de Trabajadores Autoconvocados de la Salud (Sitas). La dirigente del gremio Adriana Bueno consideró que el pacto celebrado en Casa de Gobierno constituye una “puesta en escena” de la Asociación de Trabajadores de la Sanidad Argentina (ATSA).
“Se trató de una farsa para hacernos creer que cumplieron la tarea de todo el año. Fue una simulación de quienes apoyan políticamente al Poder Ejecutivo. ATSA es prácticamente el brazo gremial del Gobernador”, señaló Bueno.
El bono de $ 1.000 otorgado por el PE a los empleados estatales en dos cuotas fue considerado por la referente sindical como un “fuego de artificio”. Bueno destacó que en el proceso de negociación los referentes sindicales no consultaron a las bases. “Se movieron arbitrariamente y sin preguntar a la gente. La dirigencia pone la cifra y pacta mientras los trabajadores son meros espectadores del proceso”, destacó.
La médica del Hospital de Concepción explicó que el Sitas no participó del proceso de cortes y protestas que derivó en el acuerdo firmado el lunes, porque considera que fueron conducidas por dirigentes que apoyan políticamente al PE. “Quienes representamos a los trabajadores en ningún caso podemos tener relaciones carnales con los gobiernos. Ni con éste, ni con ninguno”, afirmó.
Protestas en puerta
Adriana Bueno anticipó que el Sitas se está preparando para el período de discusiones paritarias que comenzaría anticipadamente. “Charlando con los trabajadores se advierte que la gente está totalmente dispuesta a realizar medidas de fuerza. Nosotros, como sindicato, ya hicimos cinco acuerdos salariales, y todos fueron obtenidos gracias a las protestas”, analizó.
Los gremios de la salud obtuvieron en abril de 2013 un aumento salarial del 28%. Bueno consideró que ese porcentaje debe ser ampliamente superado en las paritarias que se abrirían en las próximas semanas, aunque no dio precisiones respecto al piso de negociación.
“Definir un porcentaje sería irrisorio, porque los salarios son irrisorios. Todavía hay mucha gente precarizada”, insistió.
Por último, la dirigente opositora consideró que los saqueos del 8 y 9 de diciembre generaron un punto de inflexión social. “Todavía la cantidad de muertos no está clara, pero sí está confirmada la complicidad entre los delincuentes y quienes deben frenarlos”, concluyó.