BUENOS AIRES.- A seis meses del vencimiento del contrato de Juan Román Riquelme, en Boca se mostraron confiados en que será el propio futbolista el que dirá si “está en condiciones” de seguir. “Román ama la institución y el estará en condiciones de decir si está para seguir”, sostuvo el vicepresidente del departamento de fútbol, César Martucci, un dirigente de peso en el club de La Ribera.

El directivo prefirió esperar y tirarle la pelota al enganche. “Cuando termine el campeonato tomaremos la decisión que más convenga con el jugador y el entrenador”, sostuvo Martucci.

El 24 de junio, seis días antes del vencimiento del vínculo con Boca, Riquelme cumplirá 36 años. Por estas horas, el crack se recupera de un desgarro en el aductor izquierdo que le impidió jugar los dos últimos partidos del torneo Inicial y recién la próxima semana empezaría a tomar contacto con la pelota.

Y mientras por un lado se especula qué hará Riquelme de su vida después de Julio, ayer el enganche disfrutó de una visita muy particular. Se reunió con Ángel Clemente Rojas en el entrenamiento matutino.

Fue un encuentro entre dos de los máximos ídolos de Boca. “Rojitas” y Riquelme entablaron una relación desde que se conocieron. El delantero, que brilló en los 60, fue el ídolo del padre de Román, según contó en su momento el 10.

“Siempre dije que Román es el mejor de todos. Es el ídolo más grande la historia de Boca”, aseguro el ex artillero, quien seguramente desea que a partir de julio Riquelme sigue enamorando con su fútbol al hincha de boca. (DYN-Télam-Especial)