De acuerdo a la reglamentación, cada Unión debe especificarle a la UAR el formato que adoptará su torneo local con dos meses de antelación como mínimo, a fin de organizar el calendario nacional. En el caso del Regional del NOA, en principio previsto para comenzar en febrero -y tomando a enero como mes “inhábil”-  el plazo expiró a fines de octubre. Sin embargo, en las postrimerías de diciembre, la cuestión sigue entre dimes y diretes.

Lo cierto es que la exigencia se había cumplido en tiempo y forma cuando el Consejo de la URT aprobó y elevó a la entidad madre el Top 14 suscripto por la mayoría de los clubes tucumanos. No obstante, en los últimos días se le contrapuso un proyecto alternativo que propone continuar con el formato de los últimos dos años, con algunas pequeñas modificaciones, pero manteniendo el número de equipos en 16.

El principal argumento sostenido por quienes defienden la realización del Top 14 es que, salvo Tucumán Rugby, “todos los otros clubes tucumanos acordaron ese formato” (refiriéndose a los de primera, más Corsarios y Bajo Hondo). Sin embargo, consultado al respecto por LG Deportiva, Andrés Chavanne negó rotundamente que Lawn Tennis, club del que fue presidente hasta hace pocos días, haya suscripto el proyecto con los cambios. “Eso no es verdad. Nos parece que es un torneo demasiado largo, y algunos clubes no están en condiciones de jugar tantas fechas. Ya de por sí, el formato actual es agotador. No es casualidad que los equipos tucumanos lleguen extenuados al Torneo del Interior”, sostuvo, aclarando que habla a título personal y no ya como directivo de los “benjamines”.

“Hay que pensar también en los jugadores. Así planteado, el Top 14 tendrá 29 fechas. Si a eso le sumamos Nacional de Clubes o Torneo del Interior A, más Argentino y Seven de la República, algunos chicos van a terminar jugando alrededor de 45 partidos durante el año, entre club y seleccionado. Eso es una locura. Se sabe que un jugador debe jugar como mucho 30 o 35 partidos al año. Si no, estaremos condicionando su futuro”, advirtió Chavanne.

De todas maneras, el dirigente aclaró que tampoco se adhiere a la otra postura. “Cuando era presidente del club, presentamos una nota en la que propusimos un torneo de 10 equipos, con ida y vuelta y liguilla final. Al mismo tiempo, una categoría de ascenso, con otros 10 clubes, y un tercer escalón, que sería el Desarrollo. Por supuesto, con posibilidad de ascender o descender”, detalló.

Según Chavanne, el problema no se agota allí. “En la nota que presentamos, solicitamos además que se le dé importancia a los juveniles. Estamos destruyendo el rugby tucumano por no tener campeonato juvenil fuerte, de 21 y 23 años. Se están sobrecargando la cantidad de jugadores en las divisiones superiores”, concluyó.