1
Dejá el auto y caminá

Tené en cuenta que todos los días, hasta el martes 24, se restringe el ingreso de vehículos particulares al microcentro. De 10 a 14 y de 18 a 21 los peatones pueden moverse con más comodidad.

2
Veredas más anchas

Como hace varios años, la Municipalidad dispuso una “extensión” de las veredas en el microcentro para alentar el tránsito peatonal. Otro motivo más para dejar el auto y salir caminando estos días.

3
Siempre abiertos

Si querés evitar el centro y su locura, tené en cuenta que los shoppings están abiertos en horario corrido. Quizás podés aprovechar las siestas para hacer algunas de las compras que tenés pendientes.

4
Horarios del centro

Hoy a la tarde el comercio abre hasta las 22. Mañana hasta las 21 y el lunes hasta las 22, ambos días en horario corrido. El martes 24, en tanto, vas a poder hacer compras de 9 a 18.

5
¿y el domingo?

Todavía no es seguro, pero es posible que el domingo la mayoría de los comercios del centro trabajen de 9 a 14. Así lo informó Raúl Fioretti, presidente de la Cámara de Comerciantes.

6
A salir temprano

A partir de media mañana, el centro explota. Pero si podés visitar los comercios antes, entre las 9.30 y las 10.30, por ejemplo, seguramente vas a poder elegir con más tranquilidad.

7
Sin lluvia y con calor

Hasta el martes 24 inclusive hay escasas o nulas probabilidades de lluvia, así que vas a poder hacer las compras tranquilo. Pero va a hacer calor: el termómetro llegará a los 39°.

8
La listita

Tomate unos minutos y, antes de salir, armate una listita con los regalos y las otras cosas que necesitás comprar. El objetivo es salir una sola vez y resolver todo en la menor cantidad de tiempo.

9
Cargate de buena onda

El centro va a estar lleno y el calor hace que los ánimos se exasperen. Antes de salir, toma aire y cargá los pulmones de buena onda y paciencia para no andar a los empujones en el centro.

10
Ojo con la plata

Nunca está de más recordarlo: llevá la plata en un lugar seguro, no expuesto, y evitá que te roben. En estos días, los delincuentes “afilan los dientes” y se aprovechan de los tumultos.