Este no será un torneo más. Quedará en la historia por dos motivos. Nunca antes un equipo había dado la vuelta olímpica pese a haber sumado tan pocos puntos como este San Lorenzo que llegó  apenas a 33 unidades. Los hinchas también sufrieron, pero no por el flojo nivel futbolístico que se observó, sino porque la AFA y los responsables de seguridad no encontraron la manera de frenar a los violentos y decidieron cerrarles las puertas de los estadios a los hinchas visitantes.

Repasemos. Desde el Apertura 1995, cuando se decidió otorgar tres puntos al equipo vencedor de un encuentro, se jugaron 37 campeonatos. Sólo en ocho oportunidades los campeones no superaron la barrera de los 40 puntos. La lista está integrada por Boca (Apertura 2003 y 2008)), Vélez (Clausura 2005 y 2011), Lanús (Apertura 2007), Arsenal (Clausura 2012), Newell’s (Torneo Final 2013) y San Lorenzo (Torneo Inicial 2013).

Y el caso del “ciclón” es más extraño aún, ya que ocupa los dos extremos de la historia. En el Clausura 2001 logró el título sumando 47 puntos, récord que está por cumplir 12 años sin batir. Pero ahora, dio la vuelta con la peor campaña, otra marca que será muy difícil de quebrar, salvo que el fútbol siga en picada. Es más, a lo largo de estos 37 certámenes, hubo un solo subcampeón que no sumó más unidades que este San Lorenzo. Fue Racing, en el Apertura 2011 que cosechó 31 unidades, 12 menos que el campeón Boca. 

Lo que es peor, el pueblo sanlorencistas se tuvo que conformar con mirar el partido desde cualquier lado, menos del estadio, lo que en cualquier país es normal. Asusta que la AFA siga privando al  simpatizante genuino de ver a su capitán levantando la copa del título que acaba de conseguir.

Al menos queda como consuelo que el plantel y cuerpo técnico del “ciclón” pudieron celebrar en casa ajena sin que fueran agredidos, pese a la rivalidad y los temores. Pero este debe cambiar pronto porque matarán al fútbol.