RIO DE JANEIRO, Brasil.- Las fuertes lluvias que azotan Río de Janeiro desde la madrugada de hoy provocaron grandes inundaciones en varias partes de la ciudad, perjudicando el tránsito y produciendo deslizamientos de tierras que dejaron al menos cuatro personas heridas. 

A raíz del caos originado por las precipitaciones, el alcalde Eduardo Paes pidió a la población que evite salir de sus casas y anunció que la ciudad está en estado de alerta. "Pedimos que quien no tenga que salir de su casa evite los desplazamientos", dijo Paes al noticiero de la TV Globo, informó la agencia DPA. 

Una de las zonas afectadas fue la del estadio Maracaná, donde sus inmediaciones están completamente sumergidas. El estadio que recibirá la final del Mundial de 2014 tiene problemas recurrentes cuando es alcanzado por fuertes lluvias. El viernes pasado, lluvias menos intensas que las registradas hoy provocaron la inundación del sector en donde se ubica el banco de suplentes, de los salones en los que se ofrecen ruedas de prensa, de los estacionamientos VIP, de baño y corredores internos. 

Rescate de familias
En algunos barrios, el Cuerpo de  Bomberos tuvo que intervenir para ayudar a personas que habían quedado semienterradas por avalanchas. El sistema de transporte público, así como los aeropuertos de la ciudad, están fuertemente afectados por las malas condiciones climáticas, que según datos meteorológicos no cesarán en breve. 

El Río dos Cachorros, que atraviesa la ciudad, se desbordó e inundó la Avenida Brasil, una de las principales de la capital carioca, que al igual que algunas calles adyacentes está impedida para el tránsito. El aeropuerto Santos Dumont llegó a permanecer cerrado para aterrizajes y despegues por más de dos horas, tras las cuales opera con limitaciones a través de instrumentos al igual que el aeropuerto de Galeao.