BUENOS AIRES.- Luego de dos días de deliberaciones, Argentina aceptó ayer ante el gobierno de Brasil mejorar el nivel de apertura de mercados, por encima del 70 %, con vistas a un Tratado de Libre Comercio (TLC) entre el Mercosur y la Unión Europea. Así coincidieron el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich y el ministro de Desarrollo de Brasil, Fernando Pimentel, quien reconoció que, en algún momento, el gobierno de la presidenta Dilma Rousseff tuvo “dudas” de la voluntad negociadora del país.
Según fuentes diplomáticas y empresarias, los cambios en el Gabinete nacional y la reorientación política del Gobierno nacional fueron dos factores que allanaron el camino y evitaron que el país vecino avanzara en soledad en el convenio, lo que hubiera significado la liquidación del Mercosur.
En la Casa Rosada ante periodistas, Capitanich dijo ante periodistas que la propuesta argentina seguramente superará el 70% de apertura de mercados y que ésta quedará definida el 15 de diciembre. Indicó, además, que el país pretende eventualmente presentar listas de productos complementarias en concurrencia con Uruguay y Paraguay.
Hace dos semanas, Argentina había elevado en una reunión en Caracas, a la que fue el canciller Héctor Timerman, una oferta considerada “pobre” y alejada de las pretensiones de Brasil, de lograr 90% de apertura, situación que generó una fuerte tensión entre ambos gobiernos. En el interín, se produjo el recambio en el Gobierno nacional, que incluyó la salida del ex secretario de Comercio Guillermo Moreno, quien fue un obstáculo para el acuerdo. (DyN)