El Vaticano se negó a proporcionar a un panel de las Naciones Unidas la información sobre las investigaciones internas de la Iglesia sobre el abuso sexual a menores por miembros del clero, consignó la agencia Reuters. La Santa Sede argumentó que su política era mantener la confidencialidad de esos casos.

En respuesta a preguntas del Comité de la ONU sobre los Derechos del Niño (CDN), se dijo que no daría a conocer información sobre sus investigaciones internas relativas a casos de abusos a menos que sea requerido por la solicitud de un Estado o Gobierno para cooperar en procedimientos judiciales.

El panel busca evaluar la adhesión de la Iglesia a la Convención de la ONU de 1990 sobre los Derechos del Niño, tratado firmado por la Santa Sede que garantiza una amplia gama de derechos humanos para menores.

En su respuesta, el Vaticano dijo que los procedimientos disciplinarios internos “no están abiertos al público” con el fin de proteger “a los testigos, el acusado y la integridad del proceso de la Iglesia”, pero que esto no debe desalentar a las víctimas de denunciar los crímenes a las autoridades estatales.

La Santa Sede hizo notar que estaba “profundamente entristecida por el flagelo del abuso sexual” y remarcó que cambió los requisitos para la admisión de candidatos al sacerdocio, actualizado el derecho canónico y pidió a las conferencias episcopales que elaboren directrices para combatir el abuso.