LONDRES, Inglaterra.- Los dos años y medio de guerra en Siria se llevaron la vida de miles de niños. Más de 11.000 menores de 17 años han sido víctimas de ejecuciones sumarias, abatidos por francotiradores o de explosiones.
El estudio del Oxford Research Group, que llamó a todas las partes en el conflicto a dejar de atacar a niños, afirma que siete de cada 10 niños muertos en la guerra perdieron sus vidas por fuego de mortero, bombardeos aéreos o por artefactos explosivos improvisados.
Uno de cada cuatro niños perdió la vida por fuego de armas pequeñas, y casi 800 de ellos fueron ejecutados, unos 400, atacados por francotiradores. Más de 100 de ellos, incluyendo a algunos bebés, fueron torturados.
Naciones Unidas estima la cifra total de muertos en el conflicto sirio en más de 100.000.
"Una de las cosas más perturbadoras de esto es que la evidencia muestra que niños muertos por balas están siendo asesinados en forma deliberada", comentó Hamit Dardagan, uno de los coautores del informe.
"No están siendo asesinados por fuego cruzado", agregó.
El informe es el primero en su tipo que desglosa estadísticas de fallecidos para construir una imagen de cómo han muerto niños en el conflicto entre fuerzas leales al presidente Bashar al-Assad y la oposición.
El reporte fue publicado en momentos en que se informaba de intensos enfrentamientos al este de Damasco que habrían acabado con la vida de más de 160 personas en los últimos dos días, mientras rebeldes intentan romper un bloqueo de meses.
Dardagan afirmó que los hallazgos del informe muestran lo ubicua que puede volverse la guerra y cómo inocentes terminan envueltos en ella.
"La cifra principal de más de 11.000 muertes (de niños) cambiará, pero el patrón de asesinatos no", sostuvo.
El informe "Stolen Futures: The hidden toll of child casualties in Syria" puede ser leído y descargado completo en "Stolen Futures: The hidden toll of child casualties in Syria". (Reuters)