Si bien en un primer momento se temió por la falta de calibres para la producción 2013, este no resultó ser un problema grave a la hora del análisis de la campaña. La situación sanitaria que se presentó en las zonas productivas de Tucumán, generadas por la presencia de enfermedades fúngicas como "botrytis", "melanosis", y de plagas como el "trips de las orquídeas", fueron las principales causas de descarte en los empaques", reseñó el ingeniero Hernán Salas, coordinador del Programa Citrus de la Eeaoc.
A partir de este hecho, el deterioro de la fruta se produjo en forma acelerada, y numerosos empaques anticiparon el cierre de campaña ante la falta de seguridad sobre el estado de la fruta.
"Si bien el daño de las heladas afectó casi el 20% del total, el impacto fue muy marcado sobre la fruta "de verano" (se comercializa entre octubre y febrero del año siguiente), que es una ayuda importante al productor", indicó.
En cuanto a la perspectiva de la producción para 2014, el panorama resulta más que preocupante.
A la "incidencia negativa de las heladas (una de las peores registradas en la zona citrícola de Tucumán), se le agrega la falta de lluvias" que normalmente ocurre en la primavera e inicios del verano, y al "arrastre del déficit hídrico de las últimas dos campañas". Las heladas provocaron la mortandad de plantas nuevas y jóvenes y en algunos casos, severos daños en plantas adultas.
En agosto, una vez que se empezó a observar la reacción en plantaciones con brotes y flores nuevas, algunas zonas fueron castigadas por una nueva helada, de menor intensidad que la de julio. En general, se observa una reacción dispar en las plantaciones comerciales, por las intensas heladas y la falta de lluvias.
Si bien "se pudo apreciar una floración al inicio de la primavera, en algunos casos, hubo un gran derrame de flores, por lo que el cuaje, hoy, es reducido", dijo. Inclusive, existen plantaciones, "en zonas del pedemonte, en las que aún no se observan frutos", lo que es altamente preocupante.
A esta altura, si bien sería prematuro estimar un porcentaje, no existen dudas de que "habrá una fuerte reducción de la producción para esta campaña, a pesar de las expectativas de los productores por una probable reacción del cultivo". Este fenómeno sería esperable bajo condiciones climáticas más favorables que las actuales (precipitaciones y temperatura). Párrafo aparte para la fuerte granizada caída hace 15 días en la zona Norte, que quedaron muy afectadas, aumentando la susceptibilidad a contraer enfermedades ("gomosis" y "cancrosis").
Ahora, el cuidado sanitario se vuelve complejo ante la escasa cantidad de fruta en formación y de distintas edades. No se deben descuidar las aplicaciones con fungicidas a base de cobre, al igual que con acaricida (abamectin) y aceite mineral como insecticida.