LA BATALLA DE AYOHUMA

Aprovecho para destacar, especialmente para los jóvenes, que San Martín permaneció en Tucumán alrededor de 100 días, desde fines de enero al 6 de mayo de 1814. Esos días le bastaron para dejar organizada la defensa del norte. Durante la estadía en Tucumán, San Martín, Belgrano y Güemes pasaron largas horas haciendo planes y proponiéndose estrategias de guerra para vencer al enemigo. San Martín, por ser militar de carrera y con experiencia europea, aportaba sus conocimientos estratégicos, mientras Belgrano, que ya conocía la topografía de la zona y la idiosincrasia de los pueblos, le indicaba cómo sacar lo mejor en cada movimiento y de cada persona. Los veo a los tres con un mapa en la mesa. San Martín pregunta sobre la topografía, no puede llegar, la zona está ocupada por el enemigo. El que habla ahora es Güemes, el más joven y también el que más conoce el norte, nació allí, tiene su familia en la zona. En pocos días, San Martín se convence de que por el norte no podrá llegar al Perú, cuna y fuerte de los realistas. El enemigo posee uno de los ejércitos más fuertes del mundo y sus fuerzas están concentradas en llegar a Buenos Aires. Enfrentarlos sería como pretender detener con nuestro cuerpo a una manada de elefantes en carrera, imposible, tarde o temprano terminaríamos aplastados. Es necesario dividir sus fuerzas, desmoralizarlos, quitarles seguridad y provocarles el mayor número de deserciones. En estas charlas llegaron a la conclusión de que el joven Martín Miguel de Güemes era el hombre apropiado para custodiar y defender la puerta norte. Él reunía todas las condiciones: honestidad, valentía, inteligencia, entrega y amor a la patria, que se necesitaban para tan importante misión.

Carlos Civili Mir
mirediciones@gmail.com


EL NARCOTRÁFICO (I)

Finalmente, ha tenido que salir la Iglesia con un documento durísimo y hasta dramático para instalar en el Gobierno y la sociedad toda, el tema del narcotráfico que, afortunadamente, está generando amplísimos debates. Es de esperar que no se diluyan en esto, simplemente en debates. Ahora bien: a diario nos muestran operativos que tapizan el suelo con cientos de paquetes o ladrillos de droga, y pregunto: ¿una vez exhibidos a dónde los llevan? ¿Son destruidos? Cómo? ¿Ante quiénes? ¿Nos han mostrado alguna vez algún procedimiento inmediato que garantice su destrucción? Bien podrían ser reemplazados por sal o harina para luego reincorporar la droga al circuito de la comercialización, ¿no les parece? Cual un acto de fe en la Edad Media exigimos por lo tanto ver su destrucción sin tanta manipulación. Escuchaba muy nervioso al ministro Agustín Rossi explicar un complicadísimo procedimiento para controlar los aviones que se cuelan en la frontera del país. En ningún caso, de los 300 aviones detectados nos mostró el resultado del operativo. ¿Cómo los interceptan? ¿Cómo los abordan? ¿A dónde llevan el avión, mercancía y personal de a bordo? Tampoco sabemos y, por lo tanto, exigimos saber y ver para creer. El tema de la droga y del narcotráfico que se ha enseñoreado en el país con efectos criminales, letales, exige la máxima lucha por parte del Estado que desde hace muchos años parece haber estado mirando al costado porque, después del de las armas, es el negocio que no solo engorda los bolsillos sino que compra la Justicia y el poder.

Valeria González Paz
dum_valeria@argentina.com


NARCOTRÁFICO (II)

En el lapso de un año sufrí dos robos, cometidos por adolescentes drogadictos. Provienen de hogares marginales, donde sus padres y tal vez sus abuelos no tuvieron oportunidades o no las supieron buscar en un Estado ausente o que le tiran migajas (planes sociales) para tenerlos cautivos en cada elección. Quien se dedica al negocio del narcotráfico es una asesino serial, por lo tanto, no debe tener derechos. Deben cambiar las leyes de narcotráfico y de lavado de activos. Deben ser juicios breves, de no más de quince días. Que haya dos cárceles para varones y una para mujeres únicamente para este asunto. Si es extranjero se le decomisa la carga y de vuelta a sus pagos. Que todos los bienes decomisados sirvan para crear centros de recuperación. Que todas las empresas que fueran compradas con dineros espurio sigan funcionando y sus dividendos vayan a una caja única. Que haya cárcel para los testaferros, funcionarios y parientes que estén en el negocio. A las madres que por necesidad entraron en el negocio, que se les brinde un ingreso óptimo para que puedan vivir dignamente con sus hijos y realizarles un control hasta que se hayan encaminado. Al adicto, una vez recuperado, brindarle las mejores oportunidades. Les puedo asegurar que el dinero sobra para cumplir las metas. En mi plan no hay lugar para "políticos lobbistas y corruptos" y jueces garantistas. Las ratas de albañal son solo eso.

Ana María Rosa Pérez
Don Bosco 3.371
San Miguel de Tucumán


PÉRDIDAS DE AGUA

En el Camino del Perú primera cuadra, Yerba Buena, existen tres pérdidas de agua. La más importante de ellas equivale por lo menos a diez griferías abiertas en simultáneo. Otra está en la misma parada de colectivo. Lo paradójico es que tenemos medidores instalados por la Sociedad Aguas del Tucumán para el control del consumo.

Pedro Miguel Rocchio Batista
pedromiguelrocchio@gmail.com


PASEO DE LA INDEPENDENCIA

Tiempo atrás tuve la oportunidad de conocer y recorrer el barrio porteño de La Boca, convertido en un producto turístico nacional e internacional. Lugar donde está ubicada la calle Caminito y sus pintorescos conventillos surgidos a principios del siglo XX para dar albergue a los miles de inmigrantes europeos que trajeron consigo su lengua y cultura. En sus calles se instalaron farolas típicas y peatonales adoquinadas. En cuanto se ingresa, se escuchan tenues acordes de tango que van ambientando el paseo y retrotrae a quien camina a otros tiempos. A propósito, la Municipalidad tucumana creó y ornamentó el Paseo de la Independencia, que parte de la esquina de Congreso y San Lorenzo y se extiende hasta el templo de San Francisco, pasado por la histórica Casa de Tucumán, la catedral, la plaza Independencia, la iglesia de La Merced, la Casa Padilla, la Casa de Gobierno y el Museo Folclórico, entre otros emblemáticos edificios que conforman el casco histórico de San Miguel de Tucumán. Por ello, sugiero a la Municipalidad de instalar en las dos calles peatonales de la Congreso, música a bajo volumen acorde con aquellos tiempos cuando la patria nacía: el minué, el pericón, la huella, el cuando, el cielito y hasta algunas de nuestras marchas patrióticas, utilizando las columnas del alumbrado público o de frentistas que lo permitan. Esta iniciativa le daría una mayor vida a este histórico y concurrido espacio turístico capitalino.

Ysmael Díaz
Mario Bravo 247
Banda del Río Salí-Tucumán


ROBOS A ESCUELAS

Las escuelas son los centros donde se educa, se contiene y por sobre todo se brinda cariño y amor a los niños que en muchos casos tienen esa carencia. Pero también son centros donde los malvivientes descargan su ira, y lo digo con razón de causa ya que en mi escuela "Profesor Inocencio Liberani" de la ciudad de Juan Bautista Alberdi, y muchas otras escuelas de la zona, son atacadas por vándalos, insensibles, que solo hacen daño. No se dan cuenta de que en algún momento de sus vidas pasaron por las aulas de estos establecimientos, y que quizás sus hijos necesitarán de las escuelas para ser educados. Ya son incontables las veces que se sufren robos, que destruyen la cerca perimetral, que rompen los vidrios, los grifos, apedrean las luminarias, y las pocas cosas que con tanto sacrificio se logran conseguir son destruidas o robadas... Este fin de semana intentaron entrar y doblaron una reja de la puerta de acceso a la secretaría. No lograron entrar porque se pusieron dos candados grandes y una tranca, pero el daño ya esta hecho, ahora se deberá gastar dinero que no se tiene en hacerla arreglar. Se siente una impotencia muy difícil de describir. La lucha es diaria. ¿ Qué sucederá durante el período de vacaciones? Las escuelas no cuentan con serenos o personas que cuiden las instalaciones. En la escuela Liberani, hay una obra en construcción desde 2008, la cual sirve de albergue transitorio. Van jóvenes a drogarse, a dormir y a hacer de aguantaderas. Ya se habló con cuanta autoridad posible para que la terminaran, y la respuesta siempre es la misma: "No hay presupuesto". Se dejó asentado en la comisaría de lo que sucede de noche en la escuela, pero parece que a nadie, solo a los que estamos en ella, les interesa. La inseguridad nunca fue una sensación, es una realidad que nos pega muy fuerte, y a algunos los mata.

Claudio Félix Carlos Ybrahim
Pasaje Jardín de la República 391
Monteros-Tucumán


Jubilados abandonados

Es lamentable escuchar a las distintas organizaciones de todo el país (CGT, federaciones, sindicatos regionales...) que agrupan a los trabajadores activos y pasivos de distintas actividades. Desde allí parten pedidos por bonos navideños y otras dádivas para palear la situación de los compañeros trabajadores. Reclamo justo y merecido, que se tiene que hacer cumplir sí o sí, porque el que trabaja y construye este país es el trabajador y nadie más que él se lo merece. Pero, pregunto, ¿por qué nunca se incluye a los jubilados y pensionados en ese reclamo? ¿Por qué cuando se cumplen sus demandas se termina la lucha? ¿Y nosotros, los jubilados y pensionados, qué...? ¿Por qué nunca "salieron" por nosotros? ¿Acaso no se dan cuenta que pasaran a la clase pasiva algún día y sufrirán esa misma inequidad y esa misma discriminación? No es justo. Cuando las organizaciones sindicales reclaman reinvidicaciones laborales, aumentos de salario u otra cosa, siempre la clase pasiva los acompaña. Pero cuando ocurre lo contrario, los pasivos somos unos cuantos que pasamos inadvertidos ante la sociedad, y ante las ciegas y sordas autoridades que deben ocuparse de nuestros haberes. Y este pedido y reclamo, también incluye a los compañeros "bien pagados", que al haber alcanzado felizmente su objetivo, se olvidan de que la lucha la emprendimos juntos. Sólo la solidaridad efectiva nos llevará a mejorar la miseria de haberes que percibimos, muchísimos compañeros. Entonces se hará justicia.

Hugo Albornoz
humbertohugo@hotmail.com