BUENOS AIRES.- Un grupo fundamentalista interrumpió anoche en la Catedral metropolitana la conmemoración ecuménica del 75 aniversario de "La noche de los cristales rotos", considerada el inicio de la persecución y exterminio de los judíos en el régimen nazi, hecho que luego repudió la DAIA.
Testigos del incidente relataron que cuando el arzobispo de Buenos Aires, Mario Poli, intentó comenzar la liturgia de conmemoración, de la que participaban representantes de la comunidad judía y otras iglesias cristianas, un grupo ultra conservador se puso de pie y comenzó a rezar a los gritos para impedir la ceremonia, informó la agencia Télam.
Los manifestantes repartieron volantes en los que exigían: "fuera adoradores de dioses falsos del templo santo" y advertían: "los pastores que llevan a los hombres a confundir el dios verdadero con dioses falsos son lobos".
Varios de los presentes en la ceremonia forcejearon con los integrantes de ese grupo para que se retiren de la Catedral, cosa que hicieron cuando ingresaron al templo efectivos de la Policía Federal. El titular de la Delegación de Instituciones Israelitas Argentinas (DAIA), Julio Schlosser, que participaba de la ceremonia, repudió enfáticamente lo ocurrido. "Venimos trabajando por una comunidad en la que todos podamos vivir en paz", afirmó el dirigente, al cuestionar esas actitudes filonazis que ofendieron a "sobrevivientes de la Shoá" (Holocausto) que estaban en el templo y a toda la comunidad judía.
En ese grupo había "tres sacerdotes por lo menos", dijo, que ingresaron antes de las 19 y que él pudo ver mientras estaba sentado junto al nuncio apostólico, monseñor Emil Paul Tscherrig. "Es grave, mucho más grave que una noticia periodística", afirmó Schlosser, que instó a repudiar este tipo de expresiones y agradeció las palabras de desagravio cuando Poli dijo: "Hermanos judíos, esta es su casa, su presencia no profana nada".
Monseñor Poli y el rabino Abraham Skorka, rector del Seminario Rabínico Latinoamericano, estuvieron a cargo del acto litúrgico, organizado por la Comisión de Ecumenismo y Diálogo Interreligioso y la B-nai B-rith Argentina, en el que se leyeron textos condenatorios del genocidio.
Entre los religiosos de diversas confesiones también estuvieron los pastores David Calvo (Iglesia Luterana Unida), Ester Iglesias (Iglesia de los Discípulos de Cristo), Sergio López (Iglesia Dinamarquesa) y Mariel Pons (Iglesia Evangélica Metodista).