Esta red social cuenta ya con 1.300 millones de usuarios en todo el mundo y ha llegado a superar al gigante Google como página más visitada en Argentina. El dato que preocupa hoy en día es la baja edad de todos los usuarios. 

Se sabe que Facebook está programado para aceptar usuarios mayores de 18 años, pero cada vez hay más menores que mayores usándolo. ¿Cómo? Simple: a cualquier persona le basta con fingir su año de nacimiento. Tanto es así que un 80% de todos los usuarios de nuestro país son jóvenes de entre 12 y 18 años. 

Entonces, con los datos estadísticos definidos, queda saber ¿qué hacen los chicos cuando se conectan 'al face'? Lo responden ellos mismos.

Florencia Silva, 13 años:

- ¿Tenés Facebook?

- Sí.

- ¿Cuántas horas al día pasás conectada?

- Creo que cerca de 11 horas, contando la aplicación que tengo en mi celular.

- De tu lista de amigos, ¿a cuántos conocés personalmente?

- Un 25%.

- ¿Tenés en cuenta los riesgos que corrés teniendo tantos usuarios desconocidos en tu lista de amigos?

- La verdad que sí. Pero eso hace más emocionante al 'face' ya que también se trata de hacer más amigos. Pero que es riesgoso, lo es.

- ¿Te considerás una adicta al 'face'?

- La verdad que sí. No puedo estar sin conectarme.

- ¿Qué harías si te obligaran a no abrir tu cuenta por un mes?

- ¡Realmente me volvería loca!


Miguel Espínola, 16 años: 

- ¿Cuántas horas por día pasas conectado al Facebook?

- Aproximadamente 10 horas. 

- ¿Se trata de un pasatiempo o parte de tu vida social?

- Ya es parte de mi vida, y me considero un adicto al Facebook. 

- De tu lista de amigos en Facebook, ¿a cuántos conocés personalmente?

- Conozco sólo a un 20%, aproximadamente. 

Miguel se considera un adicto a esta red social, pero el mayor peligro de estar tantas horas diarias conectado es justamente el hecho de "agregar" o "aceptar" como amigos a desconocidos, que puedan leer todo lo que hacemos y publicamos minuto a minuto, la información que damos. 

Recordemos y tengamos en cuenta que el Facebook no detecta secuestradores o violadores seriales, por ejemplo (ahí el problema de publicar fotos subidas de tono) y que Facebook todo lo hace público.

CONCLUSIÓN

La conclusión en la calle es que siete de cada 10 adolescentes se consideran adictos a esta red social.

Los adolescentes tucumanos entrevistados no sólo toman la red social como un pasatiempo, sino más bien como una gran distracción. Una certeza es que si al Facebook se lo toma como un entretenimiento de máximo dos horas, no habría tantas obsesiones.


¡Está en todos lados!
Desde una computadora hasta en un celular con conexión a Internet, Facebook se convirtió en una gran obsesión mundial para la mayoría de sus usuarios. Mientras que desde un principio fue una página creada para la comunicación y el pasatiempo.

Un cambio radical:
Facebook cambió totalmente a la sociedad en estos últimos cuatro años. Los mismos jóvenes lo toman dentro de su vida social y a los problemas de siempre, como adicción al alcohol, cigarrillo o a las drogas, se le agregó uno nuevo: el Facebook.

PUNTO DE VISTA

No es algo malo si no hay abuso

Luis Romero - psicólogo social, 52 años.

Creo que hay muchos chicos y mayores también que le dedican muchas horas a navegar en Internet, no justamente para buscar información determinada sino más que nada para acceder a esta red social (Facebook). La verdad es que no me parece algo malo, es más, me parece bueno ya que es una nueva forma de interacción; una nueva forma de vincularse. Aunque algunos psicólogos discutan este tema y sostengan que no se trata de un vínculo real.

- ¿Los usuarios corren peligro al tener tantos contactos desconocidos en su propia cuenta?

- Por supuesto que es peligroso. El Facebook se convirtió en una herramienta poderosa para los pedófilos ya que tiene acceso a mucha cantidad de chicos y la oportunidad de disfrazar con ellos su identidad.

- ¿Es algo bueno la obsesión de los que pasan hasta 10 horas conectados?

- Todo en exceso es malo, eso perjudica los estudios y/o trabajo de los adolescentes ya que el Facebook es una parte de su vida a esta altura.