BERLÍN.- Una sorpresiva vuelta de tuerca se dio ayer en el escándalo diplomático entre Alemania y EEUU por el espionaje a la canciller germana, Ángela Merkel, al revelar Berlín que está dispuesto a hablar con el ex empleado de la inteligencia norteamericana, Edward Snowden, luego de que este ofreciera su cooperación a través de una carta.

"Si está dispuesto a hablar con Alemania, encontraremos el modo de hacerlo. Toda aclaración, toda información y todo dato que podamos recibir es bueno", sostuvo el ministro del Interior, Hans-Peter Friedrich, en un cambio de posición.

La Agencia de Seguridad Nacional estadounidense (NSA) interfirió durante años el celular de Merkel y de otra treintena de altos líderes políticos mundiales. En su nota, Snowden justificó haber develado el espionaje masivo. "Decir la verdad no es un crimen. Tuve el deber moral de denunciar las violaciones sistemáticas de la ley. Como consecuencia, afronté una intensa y sostenida campaña de persecución que me obligó a alejarme de mi familia y mi hogar", afirmó, para luego agregar que el Gobierno estadounidense trata "la disensión como traición" e intenta "criminalizar el discurso político como delito".

La misiva fue difundida por el parlamentario alemán de los Verdes, Hans-Christian Stroebele, quien se entrevistó con Snowden en Moscú (donde el ex espía está asilado) y aclaró que el norteamericano desearía declarar ante el Congreso de EEUU. El portavoz del Gobierno germano, Steffen Seibert, destacó el intento de Berlín de "aclarar en detalle las acusaciones" de espionaje", a las que toma "muy en serio".

"Snowden no irá a Alemania. No es posible porque no puede salir de las fronteras de Rusia", aclaró su abogado, Anatoly Kucherena, quien remarcó que un viaje pondría en riesgo su asilo humanitario.

Pedido de empresas

Las grandes empresas de Internet de EEUU exigieron a su Gobierno mayor transparencia y que ponga límites al espionaje global. El Washington Post precisó que Facebook, Google, Apple, Yahoo, Microsoft y AOL hicieron el pedido en una nota dirigida al Senado, en la que solicitan "mejoras sustanciales en la protección de la esfera privada y mecanismos adecuados para el control y supervisión de los programas" espía. El diario había revelado que la NSA infiltró a Google y Yahoo y recopiló cientos de millones de datos de sus usuarios.

El primer ministro ruso, Dmitry Medvedev, negó que el espionaje sea inusual, pero "se supone que no se realiza de una manera tan absolutamente cínica". "No es agradable ser espiado, entiendo los enojos", dijo. (DPA-Télam)