La incursión tucumana por el "Rally Nacional de Los Glaciares" en El Calafate tendrá en la dupla Juan José Gil De Marchi-Mauro Albornoz a un buen motivo para ponerle alas a la ilusión de un buen resultado. Los aguilarenses, a bordo de un Citroën DS3 Maxi Rally, buscarán recuperar terreno en un certamen que no les ha sido propicio hasta el momento.
"Sin dudas que me hubiera gustado estar más arriba en el campeonato. Pero sé muy bien que en el automovilismo hay rachas, para bien y para mal. El auto y el equipo -la Compañía General de Rally- han mejorado mucho desde el inicio de la temporada. Pienso que solo nos está faltando un toque de suerte para tener mejores resultados", contó el piloto.
"Juanjo" y "Carucha" arribaron ayer pasados las 17 a la ciudad santacruceña. Lo hicieron un vuelo de línea, que partió desde Buenos Aires. "Fue tranquilo, al final nomás hubo lago de movimiento antes del aterrizaje. Nos recibió un clima frío seco y un paisaje de similares características a Tafí del Valle", apuntó el corredor.
La carrera por venir, que se hará en el marco de la fecha 7 del Campeonato Argentino, resulta toda una incógnita para los casi 50 inscriptos (entre los se encuentral otros tucumanos: Gerónimo Padilla y Samir Assaf). El mismo Gil De Marchi reafirma el concepto: "si bien Mauro me contó algo de lo que leyó sobre los caminos, la real dimensión de todo la vamos a tener cuando comencemos a confeccionar la hoja de ruta. Por lo poco que ví, hay muchos caminos llanos, con rectas y curvas de 90°, todo rodeado de cerros bajos. El panorama es parecido a cuando corremos en Neuquén".
Por último, el aguilarense puso negro sobre blanco con respecto a sus chances en el muy competitivo Maxi Rally. "Es verdad que cuando sufrí el problema físico que me impidió ir a San Luis, perdí el envión que traía. En esta categoría, estar mucho tiempo parado se paga con magros resultados. Pero eso ya pasó y estoy con todas las pilas puestas para esta carrera. La idea es poner todo de entrada, la verdad es que tengo hambre de podio", concluyó.