BUENOS AIRES.- El "cachetazo" que recibió el kirchnerismo en las recientes elecciones legislativas internas abiertas (PASO), obligó a sus estrategas a revisar, entre otras, la política de seguridad y su visión del problema.
En ese contexto, el candidato a diputado del oficialismo bonaerense, Martín Insaurralde volvió a defender su proyecto para bajar la edad de imputabilidad de delitos, al sostener que "los chicos no tienen que estar en las calles", mientras un juez platense y diputados de la oposición dijeron que la medida era "poco seria" y "oportunista".
"Nadie dice que los chicos vayan a la cárcel", argumentó el intendente de Lomas de Zamora ante las críticas que generó la iniciativa, y remarcó que "hoy la desprotección la tiene la víctima, como también el menor que queda en la calle" y, dijo, "yo no los quiero ver en la calle".
La medida, impulsada por el oficialismo tras la derrota en las primarias en la provincia de Buenos Aires, generó el rechazo de un sector de la oposición y de la Justicia que la calificaron como un proyecto "electoralista".
El Estado falló
Insaurralde aseguró, desde la mesa de Mirtha Legrand en "América TV", que "el Estado debe hacerse cargo de los menores. El Estado ha fallado en la política de penalidad juvenil. Hace muchos años que se debe ese debate en la Argentina y yo quiero llevarlo a la Cámara de Diputados (si es que resulta electo en octubre y asume en el cuerpo de diputado nacional)".
Señaló que los jóvenes "no deben tener el mismo tratamiento penal que los adultos". Hoy, afirmó, "un joven, cuando va a una comisaría o a un calabozo, va a la 'universidad del delito'". Asimismo, pidió "cambiar el sistema penitenciario", para "reinsertar a los chicos en la sociedad" y que no vuelvan a delinquir.
Un problema real
El diputado nacional Roy Cortina (socialismo) calificó el proyecto como una "medida oportunista" de cara a las elecciones legislativas de octubre y advirtió que se debe tener en cuenta "el contexto" en el que el Gobierno plantea la iniciativa. "Pretender resolver todos los problemas que se han acumulado en estos últimos 5 o 6 años, producto del resultado de las internas, requiere un doble análisis", añadió. Y, reflexionó: "sirvió para algo la votación de la gente: ahora, el Gobierno empieza a reconocer problemas como la inflación y la inseguridad".
El juez en lo Contencioso Administrativo, Luis Arias cuestionó también el proyecto, al afirmar que "el mero anuncio de bajar la edad de imputabilidad, sin otras medidas, no es una propuesta seria. Hay que reformar el sistema penal juvenil". Estas, opinó, "son medidas de coyuntura electoral", y advirtió que "esta ley que se pretende modificar es del proceso militar y la vamos a endurecer más. Si bajamos la edad, en cuatro años nos vamos a dar cuenta que no sirvió de nada, mientras sigamos con sistemas de encierro y represivos, los resultados van a ser muy negativos". (DyN)
"Trasladar gendarmes es improvisar"
El ex ministro de Defensa -de la presidencia de Raúl Alfonsín-, Horacio Jaunarena cuestionó el "grado de improvisación" en el traslado de gendarmes desde el norte del país hacia el Gran Buenos Aires y señaló que esa decisión obedeció a "una medida electoral" que "deja desprotegida la frontera, que es un colador". El ex funcionario consideró que el traslado es un refuerzo del "Operativo Centinela" en el marco del Plan Nacional de Seguridad, "no va a servir para mejorar la seguridad" en el Conurbano.
En tanto, reiteró que los gendarmes se alojan en la Provincia en condiciones de hacinamiento, porque "fueron notificados con pocas horas de anticipación que iban a ser trasladados" y remarcó que "fueron traídos al gran Buenos Aires sin prever un mínimo de comodidad". "Esto no es más que una especulación electoral y un maltrato a personas que no merecen ser maltratadas, como son los gendarmes", expresó en diálogo con "Radio 10". Además, sostuvo que con esta medida impulsada por el Ministerio de Seguridad, "se satura el Gran Buenos Aires de gendarmes y se deja despoblada la frontera norte, que queda abierta para el contrabando y narcotráfico. "Es un conjunto de medidas improvisadas que no va a servir para mejorar la seguridad porque, mientras se aborde con medidas espasmódicas y no como un problema sistémico, no va tener resultados", enfatizó.
Jaunarena apuntó también contra el "Operativo Fortín", que prevé el envío de tropas a colaborar con la vigilancia de fronteras en el norte del país, al considerar que "los hombres de las Fuerzas Armadas no están preparados para seguridad" en esas zonas. Esta decisión, aseveró, "confunde la misión de las Fuerzas Armadas de estar al servicio de una Nación, de estar al frente de un proyecto político que, a lo sumo, representa una porción de la sociedad", opinó. (DyN)