Unas 300 personas intentaron instalarse en el predio del Club Tiro Federal, situado en avenida Silvano Bores al 600, hace una semana. En aquel momento, el fiscal Arnoldo Suasnábar ordenó el desalojo y dispuso que una guardia policial custodie el lugar. Pero la situación no se calmó. Jorge Miranda, quien es colaborador de la comisión directiva, dijo a LA GACETA que estas personas instalaron sus carpas alrededor del club y, ante el mínimo descuido de los uniformados, intentan ingresar nuevamente. "El club está siendo asediado", afirmó.

Miranda explicó que se trata de un grupo organizado de personas, que se retiran por turnos para ir a dormir o comer y después vuelven para reagruparse. "Están armados con machetes y palos. Los miembros de la comisión directiva no pueden transitar ni a tres cuadras del club porque les apedrean los autos y ya han sido amenazados", aseguró el hombre.

Ayer a la mañana hubo un nuevo intento de usurpación. Por esa razón, el lugar estuvo rodeado de policías de Infantería y caballería. Todo comenzó cuando estas personas derribaron las paredes que rodean al predio, la semana pasada. "En este momento, para el club es económicamente imposible volver a levantarlas", agregó Miranda.