Durante alrededor de dos años, entre fines de 2006 y 2008, la Universidad Nacional de Tucumán (UNT) pagó el alquiler de la casona de Virgen de la Merced (ex Rivadavia) 417, donde funcionaba el programa Educación Permanente para Adultos Mayores (EPAM). Estos pagos -que se realizaron con fondos del Rectorado, pedidos por la Secretaría de Extensión- se hicieron de hecho, porque ningún documento obligaba a la casa de Juan B. Terán a hacerlos: en el contrato siempre figuró como locataria la cooperadora del EPAM.

No obstante, sí se llevaron adelante tratativas para que la titularidad del contrato de alquiler pase a la UNT. Así lo había admitido el actual secretario de Extensión, Mario Leal, a LA GACETA. "En un momento hicimos varios intentos para que nosotros, como UNT, alquilemos el local; pero eso fracasó, no se llegó a sustanciar nunca", había señalado. Tal afirmación fue ratificada ayer por el predecesor de Leal al frente de esa Secretaría, Manuel Andújar. "Había tratativas de todo eso; por los problemas con el (pago del) alquiler y con los fondos", indicó a LA GACETA.

La presidenta de la cooperadora, Ester Bonanno, había sugerido que sí existían documentos que obligaban a la UNT a costear el alquiler. "La cooperadora (lo) pagó hasta hace cuatro o cinco años; luego se firmó un convenio, mediante el cual debía pasar a pagarlo la UNT. Ese convenio no está, porque desapareció el libro de actas de la gestión anterior. Nunca pagaron. Y como tampoco hicieron el cambio de titularidad del contrato, el embargo llega a la cooperadora", había señalado. El embargo al que refiere alcanza los $ 780.000, y es producto de un juicio por desalojo iniciado por los propietarios de la casona donde se dictaban los cursos contra la cooperadora.

Bonanno había agregado que las finanzas de la entidad que preside se encuentran en estado crítico, debido a que el embargo generó una merma en los ingresos. De sus números se desgrana que la cooperadora recauda al mes entre $ 5.250 y $ 5.670; y que eso apenas llega al 30% de lo que requieren para funcionar.

"Ningún compromiso"

Andújar recordó que las complicaciones con el pago del alquiler de la sede del EPAM eran frecuentes, pero negó que haya existido un convenio que obligue a la UNT a abonarlo. "Eso venía desde siempre; hasta que nos fuimos todo quedó pagado, (aunque) no había firmado ningún compromiso", aclaró. Y contó que en algún momento, durante su mandato al frente de la Secretaría de Extensión, se gestionó la compra de un inmueble donde pudiera funcionar el EPAM. Andújar dejó el cargo en agosto de 2009, casi un año antes de que finalice su gestión: fue una de las víctimas de la pelea entre el rector, Juan Alberto Cerisola, y su ex vicerrectora, María LuisaRossi: él era funcionario rossista.

Fuentes de la UNT reconocieron que el inmueble donde actualmente funciona el Decanato de la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales, en Muñecas 446, había sido comprado para esa finalidad, pero que quedó descartado debido a que, tras la compra, notaron que no reunía los requisitos para albergar a adultos mayores. Otra fuente puso en duda esos motivos: "se hicieron arreglos, se remplazó la escalera de acceso por una rampa, y se hicieron las divisiones para las aulas; la idea era que el EPAM inicie el ciclo lectivo 2010 en esa nueva sede".