BUENOS AIRES.- El presidente de la Cámara de Diputados, Julián Domínguez, atribuyó ayer la instalación anticipada de un debate sobre la jefatura de ese cuerpo a una necesidad de dirigentes de unirse "en un frente opositor, que a una posibilidad real de conducción institucional" .
De este modo, Domínguez ante una consulta de Radio 10 se refirió a la pretensión de la UCR, el PRO, el peronismo opositor, de Francisco De Narváez, y un sector del Frente Renovador de desplazar al oficialismo de la conducción de Diputados, aun cuando faltan dos meses para los comicios y más de tres para la designación de autoridades de esa cámara.
De hecho los opositores buscaron acceder a la presidencia de la Cámara en 2009 cuando el oficialismo perdió las elecciones y, a diferencia de esta situación, en ese momento el kirchnerismo contaba junto con sus aliados con 115 diputados, que es casi la misma cifra de legisladores propios que tiene en la actualidad, y mantendrá o superará si se repiten los resultados obtenidos en las PASO.
Por ese motivo, Domínguez adjudicó esa ofensiva "al deseo de referentes opositores en ubicar personerías en un frente opositor que a una posibilidad real de conducción institucional de la Cámara el 10 de diciembre".
Tradición parlamentaria
En ese contexto, Domínguez dijo: "la tradición parlamentaria indica que la primera minoría conduce el cuerpo y el bloque que tendrá más diputados será el Frente para la Victoria, por lo que esta expresión de deseos de referentes opositores está más vinculada a unificar personerías en un frente opositor que a la posibilidad real de presidir la cámara". Reiteró que como sucede cada dos años cuando hay renovación parlamentaria, las autoridades se "discutirán entre los 257 llegados en su momento", y volvió a insistir en la necesidad de contar con mayoría en el Congreso que acompañe las políticas oficiales.
En ese sentido, el legislador bonaerense señaló que para el gobierno estar acompañado por el Parlamento es necesario para facilitar las políticas de quien tiene que gobernar el país y eso es la aspiración de los bloques que llegamos a la Cámara como poder.
En tanto, el prestigioso politólogo italiano Gianfranco Pasquino consultado por la agencia oficialTélam opinó sobre esta temática y aseguró: "no hay nada de natural en la posibilidad de que en un sistema presidencialista como el argentino, partidos con minoría parlamentaria se unan para acceder a la presidencia de la Cámara de Diputados.". "No hay nada de natural ni de obvio", agregó Pasquino sobre cómo deben conformarse las autoridades parlamentarias cuando partidos minoritarios reclaman en conjunto cargos en un Parlamento. Pasquino,visitante asiduo de la Argentina, participó en varias conferencias sobre este tema en todo el país, junto a figuras políticas tanto del oficialismo como de la oposición.
El reparto de autoridades
El politólogo, dos veces senador de la República italiana y coautor del célebre "Diccionario de Política" junto a su maestro Norberto Bobbio, aseguró que el reparto de autoridades debe hacerse en base a "acuerdos políticos". Pasquino precisó: "si la suma de los partidos B, C y D es mayor a la de A, entonces el reparto debe hacerse de acuerdo a la posibilidad constitucional y reglamentaria de cada país, y siempre es un problema de relación de fuerzas, de acuerdos, políticos". "La llave del éxito en política está en la capacidad de construir acuerdos y coaliciones", añadió el ex senador y docente en universidades de Europa y Estados Unidos.
El debate ya está instalado. La propia presidenta Cristina Fernández lo anticipó en Tecnópolis, luego de la derrota de las PASO. Usó una ironía anticipándole a Domínguez: "Julián, quieren tu cargo". Y la oposición salió de inmediato a reafirmar esa intención: "Si el oficialismo pierde las elecciones y la mayoría en la Cámara de Diputados, la presidencia debe ser para la oposición", coinciden las voces opositoras. (Télam)