MADRID.- Los ex secretarios generales del Partido Popular (PP), Javier Arenas y Francisco Alvarez Cascos, afirmaron ayer ante el juez, Pablo Ruz, que no tienen constancia de que la agrupación oficialista se haya financiado ilegalmente durante sus gestiones o que hayan cobrado haberes en negro, como denunció el ex tesorero Luis Bárcenas. Pero admitieron que había un fuerte descontrol en la recepción de las donaciones, al punto de que no se controlaba la identidad de los donantes, ni si tenían relación con la Administración Pública o contratos de servicios públicos.
Al llegar a tribunales, los testigos fueron recibidos con abucheos y al grito de "ladrones" y "sinvergüenzas" por medio centenar de ciudadanos que se congregaron en las cercanías del edificio.
Según el detenido Bárcenas, Álvarez Cascos cobró en negro entre 1990 y 2004 unos U$S 560.000; y Arenas, U$S 312.000 entre 1990 y 2011. Aunque sus cargos fueron ocupados en períodos anteriores al que se delimitó la investigación, Ruz los citó porque podían aportar "datos relevantes" para la causa.
Las presencias en la Justicia de los dos políticos precedió a la comparecencia de la actual número dos del PP, María Dolores de Cospedal, que tendrá lugar hoy. Es la primera vez que encumbrados referentes deben ir a declarar a la Audiencia Nacional. Cospedal fue involucrada directamente por Bárcenas como uno de los dirigentes que cobró sobresueldos en negro, junto con el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, imputación que el mandatario rechazó en el Parlamento.
En tanto, el jefe del opositor Partido Socialista Obrero Español, Alfredo Pérez Rubalcaba, volvió ayer a considerar que Rajoy faltó a la verdad en el recinto. "Hoy sabemos que dijo más mentiras y no pueden quedar impunes", reclamó.
Hace un mes, Bárcenas (cuyas cuentas bancarias en Nueva York fueron bloqueadas ayer) reconoció la existencia de una contabilidad paralela en el PP durante dos décadas, en la cual se registraban ingresos no permitidos por la ley de financiamiento político y el pago de dinero a la cúpula partidaria, sin que estén declarados al fisco. Sus sucesores en el partido, Cristóbal Páez y Antonio Ortiz, negaron ayer la existencia de ese registro B, pero el primero admitió que cobró dinero en negro por U$S 15.000 de manos del ex tesorero, tal como figura en los documentos manuscritos entregados al juez.
Alvarez Cascos dejó el PP en 2011 y fundó el partido regional Foro Asturias; Arenas sigue en la fuerza derechista como vicesecretario general de Política Autonómica y Local. (Especial-Télam)