Martín De Zan no se cansa de remarcar la inclusión en el plantel de U19 de seis jugadores de la categoría U17. Una de las joyas del equipo, Pablo Iván Gramajo, es uno de los que le dio a él y al seleccionado tucumano juvenil una enorme satisfacción este lunes al coronarse campeón invicto del Regional, ganándole nada menos que al anfitrión, Santiago del Estero, 87-76.

Tucumán puso el alma y la combinó con la dosis exacta de inteligencia para derrotar en la final al rival de siempre, en un clásico caliente y que tuvo su máximo pico de tensión sobre el cierre cuando Gabriel Deck, el internacional santiagueño, le hizo una recriminación a Leandro Vildoza, el mejor del partido.

La cuestión contagió a los bancos y hubo cruces verbales entre los técnicos, pero enseguida retornó la calma. Tucumán, con un enorme trabajo de Vildoza y la mano caliente de Gramajo (goleador de la noche, con 36, y 24.6 de media en el cuadrangular), más el sacrificado aporte del resto (Contreras, Pérez Soto, Romero, Jarma) había construido una gran victoria. Chelón pareció idear en juego en su cabeza y manejó los tiempos. Iván, en tanto, metía miedo con su poder anotador. "Era frustrante venir a un Regional y perder por 20 o 30. Esta vez el equipo puso lo necesario. Es verdad que Leandro se lleva gran parte del crédito, pero todo el equipo hizo un trabajo espectacular", señala el escolta de Talleres.

En la misma línea de pensamiento, Marcos Contreras (se bancó todo en ambos tableros), de Nicolás Avellaneda, avala las palabras de aquel. "Sí... Venía con bronca porque el año pasado nos dejaron afuera en U7 y U19. Tuvimos mucho huevo y compañerismo, ganar así es muy lindo", dice el ala pivot del "trueno verde". (Especial)