BRUSELAS/WASHINGTON.- La Unión Europea (UE) decidió ayer, por unanimidad, incluir al brazo armado de la organización islámica libanesa Hezbollah (Partido de Dios) en la lista de grupos terroristas. El grupo surgió en 1982, como reacción a la invasión de Israel.
La medida limitará la "capacidad de actuar" del movimiento chiíta, ya que implica el congelamiento de sus cuentas en todo el territorio europeo; le impedirá que recaude fondos; y podrían ser sancionadas las personas y organizaciones que tengan contactos con este grupo. Sin embargo, no implicaría el fin de su accionar terrorista, ya que reciben armas y apoyo de Irán y tiene sólidos ingresos desde América Latina, con el tráfico de drogas y de armas, según un informe del instituto de estrategia norteamericano Stratfor.
"La UE ha enviado un claro mensaje de que se mantiene unida contra el terrorismo", dijo el canciller británico, William Hague. Londres había solicitado la inclusión de la agrupación en la lista después de un sangriento atentado en Bulgaria contra un colectivo con turistas israelíes, en el que murieron siete personas. "No podemos cerrar nuestros ojos a lo que ocurrió o a las actitudes que tienen en Siria", agregó el ministro de Asuntos Exteriores español, José Manuel García-Margallo, en referencia al apoyo de Hezbollah a las tropas del régimen de Bashar Al Assad.
Desde el Líbano se consideró "precipitada" la decisión. "Debería haber habido más debate antes de adoptar este paso, para que no se refleje negativamente o tenga repercusiones en nuestro país", advirtió el canciller, Adnan Mansur, cercano a Hezbollah. En el sur de su territorio están desplegados miles de soldados de 14 países europeos en la misión de paz de la ONU, para evitar choques con Israel.
En cambio, la medida fue elogiada por Israel y Estados Unidos, a través de su secretario de Estado, John Kerry: "la UE envía un fuerte mensaje que dice que Hezbollah no puede operar con impunidad y que sus acciones tendrán consecuencias". (Reuters-DPA)