Tucumán se desperezó con una sensación térmica de -5°, a las 7, cuando el termómetro marcó a esa hora una mínima de -1°, por lo que se espera una máxima que no superaría los 9°, de acuerdo a la estación local del Servicio Meteorológico Nacional (SMN) con sede en Cevil Pozo, al este de esta provincia.

El cielo amaneció despejado pero se incrementaría la nubosidad con el paso de las horas y se espera que en la zona serrana aún se produzcan nevadas aisladas, de igual modo que ayer. Los lugares en donde se produciría el fenómeno serían en el sur tucumano, en la zona de Las Lenguas y Alpachiri; en la villa de Tafí del Valle y sus alrededores, y en las cumbres cercanas a Raco.

Según Santiago Cogorno, del SMN, las condiciones serían similares mañana, con temperaturas que oscilarían entre -1° y 10°; mientras que el miércoles la situación sería similar, aunque las marcas ya se ubicarían entre los 3° y los 14°. "En la Patagonia ya se encuentra un nuevo frente y se prevé que afecte al norte argentino el próximo fin de semana con temparaturas muy bajas, similares a las actuales", indicó el meteorólogo.

Tafí del Valle se congela

Desde las 8 se bloqueó el paso de vehículos por la ruta provincial 307, en el tramo Acheral-Amaicha del Valle porque en algunos tramos se formó una capa de hielo que tornaba peligrosa la circulación. Por esta razón, al mediodía ya había una cola de cerca de dos kilómetros de autos, camionetas y camiones en la zona de Las Mesadas, al pie del cerro. Entre ellos, móviles con turistas. Alrededor de las 14 se autorizó la circulación, aunque en grupos de 10  

La brasileña Franceile Mesquita, acompañada por sus dos hijos y su marido, quien viajó a esta región para conocer los Valles, se quejó por la falta de información sobre el estado de las rutas. Varada desde las 9 en la zona, señaló que de haberse enterado a tiempo del corte, hubiera esperado en San Miguel de Tucumán hasta que se permitiera el paso.

Tampoco se puede transitar entre el municipio tafinisto y Amaicha del Valle debido a que en la zona de El Infiernillo, el punto más alto de la traza, a 3.000 metros sobre el nivel del mar, el congelamiento afectó a la ruta. Los tafinistos despertaron con una mínima de -4°, que se tradujo en una sensación térmica de -8°.