MOSCÚ/QUITO.- El desconocimiento del paradero de Edward Snowden, el informante que develó la trama de espionaje mundial de Estados Unidos, agrega un capítulo más a una saga de hechos digna de un thriller de Hollywood.
El joven informático habría abandonado ya Rusia (adonde llegó el domingo desde Hong Kong, escapando el pedido de extradición norteamericano) con rumbo desconocido. Si bien tenía reservado un pasaje hacia La Habana, su asiento 17A fue ocupado por otra persona en el vuelo de ayer de la compañía estatal rusa Aeroflot. Decenas de periodistas pagaron U$S 2.000 por pasaje, con la esperanza de obtener unas palabras suyas, pero el juego del gato y el ratón continuó. Las sospechas de que estaba escondido a bordo no se despejaron del todo.
Sólo Ecuador confirmó oficialmente que Snowden le solicitó asilo, pero no definió su decisión. El presidente, Rafael Correa, dijo que analiza con "responsabilidad" el pedido y que tomará "con absoluta soberanía la decisión que creamos más adecuada". Julian Assange, fundador del grupo WikiLeaks que está asistiéndolo en su escape, confirmó que Rusia fue una parada en su camino hacia Quito.
En EEUU, un pedido de perdón a Snowden creado en la sección "nosotros, el pueblo" de la página web de la Casa Blanca superó las 110.000 firmas.
El vocero de la Casa Blanca, Jay Carney, dijo ayer que la evaluación de EEUU es que aún está en Rusia, por lo que "espera" que las autoridades rusas "estudien las opciones para expulsarlo y para que afronte la justicia por los crímenes por los que se le ha acusado". Mientras China prefiere evitar los conflictos, Rusia parece que los recibe con brazos abiertos, tuiteó el politólogo ruso Dmitri Trenin. "Lo que ha pasado confirma las tendencias negativas de las relaciones entre Rusia y EEUU. El factor Snowden sólo da rostro a esas tendencias", dijo el analista Alexei Makarkin.
El secretario de Estado norteamericano, John Kerry, advirtió que este incidente podría complicar las relaciones con China y con Rusia. "Les insto a que sigan los estándares de la ley, pues va en interés de todo el mundo. En los últimos dos años, transferimos siete prisioneros que Rusia reclamaba, así que creo que la reciprocidad y la aplicación de la ley son muy importantes", detalló. "Los estadounidenses no nos pueden exigir nada. Podemos entregarlo o no", afirmó el responsable de Derechos Humanos de Moscú, Vladimir Lukin. A su vez, China expresó su "profunda preocupación" por la revelación de Snowden sobre ciberataques de EEUU contra su país. (DPA-Reuters-Télam)