SAN PABLO.- El Gobierno del Estado brasileño de San Pablo anunció que no reprimirá a los manifestantes que participen en las movilizaciones de protesta contra el aumento del precio del transporte público, luego de las denuncias por la violenta represión policial de la semana pasada. "San Pablo no quiere violencia, los ciudadanos que no participan en las movilizaciones no quieren que se repitan esos hechos", afirmó Fernando Grella Vieira (foto), secretario de Seguridad Pública paulista. Los abusos policiales forzaron a las autoridades a alterar los procedimientos de seguridad, a descartar el uso de balas de goma y a la no intervención de la cuestionada Tropa de Choque de la Policía Militarizada para la manifestación realizada anoche, que se desarrollaba al cierre de esta edición. Sólo se autorizó la represión en caso de que se registren actos de vandalismo. Las protestas son convocadas por el Movimiento Pase Libre, que reclama "un transporte público gratuito y de calidad", explicó su referente, Mayara Vivian. (DPA-Télam)