BUENOS AIRES.- El maquinista Daniel López, quien manejaba el tren que chocó contra una formación estacionada en Castelar, fue liberado ayer pero seguirá imputado en la causa y su abogada, Valeria Corbacho, desestimó las pruebas que el Gobierno nacional presentó contra su defendido.
El secretario de Prensa de La Fraternidad, Horacio Caminos, confirmó la liberación y criticó al ministro de Transporte, Florencio Randazzo, por sumar a la causa datos "tendenciosos para generar responsabilidad" en el trabajador, como la presentación de la CNRT con fotos de la cabina.
En es línea, Corbacho advirtió que "como quedaron los comandos de la cabina tras el impacto no es indicativo de nada" porque no queda registrada "la cantidad de maniobras" que hizo el motorman para frenar. Luego insistió con que López intentó frenar varias veces pero el sistema falló porque "es un injerto" y alertó que cuando se hagan las pericias a los frenos "hay que prestarle atención al resultado porque pueden andar bien cinco estaciones y en la sexta fallar".
Además, reveló que hace algunos meses, la formación que impactó de frente contra el tren estacionado fue sacada de circulación porque estuvo a punto de protagonizar una tragedia de características similares a la de Once.
Según Corbacho, hasta el último momento pretendió frenar, "porque no se va a querer matar". "Es (por López) padre de cuatro chicos y atiende él mismo un comedor comunitario para más de 50 chicos", indicó. Y agregó que él no llamó al control para informar del problema porque tenía que intentar frenar, en pocos metros. (DyN)