Vivir para el trabajo siempre ha sido una concepción clásica en el mundo laboral. Los Baby Boomers (nacidos entre 1946 y 1964, es decir, después de la Segunda Guerra Mundial) están dando paso a las nuevas camadas de ejecutivos. Es lo que la fundadora y presidente de Whalecom, Paula Molinari, ha denominada, en su libro, como "Turbulencia Generacional". Por caso, los nacidos entre 1980 y 2000 (Generación Y) están tomando el poder dentro del mundo empresario.

Molinari no tiene dudas de que esa nueva generación, a la que pertenecen cerca de 2.300 millones de chicos en el mundo, serán los que liderarán el Management de las próximas cuatro décadas. "Son tan optimistas como sus padres, pero a la vez más pragmáticos", puntualiza la experta que hoy, a las 10, en el Hilton Garden Tucumán, dará una conferencia organizada por el Instituto Privado San Judas Tadeo y dirigida a profesionales, empresarios, directivos y personal jerárquico de la Administración Pública.

Según la directora Académica del Programa Ejecutivo de Recursos Humanos de la Universidad Di Tella, la Generación Y busca placer y diversión en la oficina. En este contexto, la responsabilidad y el compromiso se evidencia cuando estos jóvenes encuentran sentido a lo que hacen. Por naturaleza, son creativos e innovadores, alentados por la tecnología que actualmente se dispone. Se rebelan frente a situaciones en las que sienten que no aportan ningún valor, define Molinari. Velocidad en los procesos, buen clima, mejores relaciones y jefes que los escuchen constituyen el hábitat ideal para que los "Gen Y" desarrollen su carrera dentro de una organización.