BUENOS AIRES.- Sensaciones encontradas son las que seguramente invaden a Boca tras el histórico descenso de Independiente a la Primera B Nacional, porque se convirtió así en el único de los denominados equipos grandes en no perder la categoría, aunque al mismo tiempo vive un presente poco colorido al estar en la última ubicación del torneo Final.
Consumados los descensos de San Lorenzo y Racing en los inicios de la década del '80 y de River Plate e Independiente en la que actualmente se transita, Boca tendrá la facultad de exponer que es el único equipo de los cinco más relevantes de Argentina que no conoce la Primera B Nacional.
De todos modos, su presente no tiene grandes luces y la victoria de hoy de Argentinos Juniors, uno de los elencos que pelea por la permanencia, ante Colón, lo hizo caer al último casillero del actual certamen doméstico.
Es cierto que mañana podrá superar al conjunto de Ricardo Caruso Lombardi e incluso podrá alcanzar la línea de Vélez y Unión en la posición 16 si esos equipos empatan mañana en su enfrentamiento en Santa Fe, pero no menos real es que la sensación ambivalente seguro será difícil de extirpar sea cual fuera su suerte al cabo de este torneo.