Pasaron 90 minutos, pero quedan 90 minutos más. El esfuerzo se nota cada vez más a medida que la temporada se acerca al final del camino y la ansiedad gana protagonismo en la previa de cada duelo. Lo que está en juego es demasiado.

San Martín le ganó el primer duelo a San Jorge y quedó cerca de la clasificación, pero el triunfo tuvo su precio. El físico de algunos jugadores muestra huellas de la "batalla" futbolística. Pueden dar fe de eso Gustavo Ibáñez y Gonzalo Cáceres. Ambos se movieron en forma diferenciada en la práctica que el plantel "santo" realizó ayer en el complejo "Natalio Mirkin". El "Súper Ratón" sufrió una fatiga muscular en la pierna derecha; mientras que el santiagueño acusa una molestia en la pierna izquierda, lesión que lo obligó a ser reemplazado en el complemento del partido por Alejandro Rébola. De todos modos, el cuerpo médico confía en la recuperación de ambos y adelantan que estarán a disposición de Carlos Roldán para la revancha que se jugará el sábado, a las 16, en La Ciudadela.

Otra buena noticia para el entrenador es que podrá contar con Federico Pomba y Esteban Goicoechea. Ambos cumplieron la fecha de suspensión. De todos modos, Rolando Serrano y Luis Vega, sus reemplazantes, fueron pilares del equipo en el partido de ida y no será sencilla la tarea para Roldán al momento de decidir si les devuelve la titularidad a los primeros o ratifica a quienes los sustituyeron.

Por otra parte, el plantel cobró el 75 por ciento del sueldo de marzo luego del partido del domingo, con lo que la deuda salarial se achica.

En San Jorge, el zaguero Patricio Krupoviesa se entrenó sin exigencias por una molestia física. En tanto que Juan Cabrera comenzó a intensificar su trabajo. El marcador lateral estará a disposición del técnico Osvaldo Bernasconi.

La actividad estuvo centrada en lo físico con la orientación del profesor Sergio Figueroa. A su término, el plantel realizó movimiento con pelota en espacios reducidos.

El único ausente fue el carrilero Emir Ojeda, con permiso para rendir una materia en la facultad.

Con respecto a la revancha, los jugadores prefieren no opinar sobre la decisión de jugar en La Ciudadela, pese a que San Jorge debe ser local. "Nos recomendó el cuerpo técnico que no hablemos del tema", expresó un integrante del plantel.

Lo que quedó claro es que nadie perdió la confianza. "Daremos vuelta el resultado", aseguran los futbolistas de San Jorge.