Las penurias por las que pasaron los padres de Luis María Emilio, el bebé de seis meses que padece leucemia y que desde ayer necesitaba ser trasladado al Hospital Garraham, concluyeron en el momento mismo que la familia abordó el avión sanitario que los llevaría a Buenos Aires.

"El bebé está excelente, y re bien atendido", dijo a LA GACETA Emilce Figueroa de Emilio, la mamá de Luis María, quien junto con su esposo Franco Emilio consiguieron a las cansadas que el pequeño partiera de Tucumán a Buenos Aires a bordo de un avión sanitario de Aerovida, una empresa de ambulancias aéreas. 

"Nos recibieron muy bien. Incluso, el senador (de la UCR José) Cano tramitó para que mi marido pudiera alojarse en un hotel, así que ahora estamos bien", remarcó Emilce, y aclaró que no tuvo ningún contacto o comunicación con autoridades del Ministerio de Salud de la Provincia. "No nos llamó nadie, salvo la prensa y la secretaria del senador Cano", insistió.

Alrededor de las 13, la aeronave partió rumbo a Buenos Aires con Luis María y sus padres. "Nos están trasladando gracias a los medios", dijo la madre del pequeño momentos antes de despegar.

El niño fue diagnosticado ayer y, según su madre, por la tarde solicitó la derivación del Hospital de Niños al Hospital Garraham, en Buenos Aires. Afirmó que se comunicó al 107 y solicitó con urgencia el avión sanitario de la provincia para el traslado. Sin embargo, sostuvo que desde el servicio de emergencias le respondieron que la aeronave "está rota".

"Mi hijo tendría que haber viajado ayer. Nos prometieron el avión sanitario para ayer y luego para hoy a las 7 mañana. Nadie se mueve y mi hijo se muere. Es cuestión de horas", dijo, desesperada, la madre del pequeño esta mañana.

Tras hacerse público el caso, el ministro de Salud Pública de Tucumán, Pablo Yedlin, sostuvo que ayer por la tarde se informó del traslado de Luis María. "No es común la leucemia en edades tan pequeñas. Ayer se hicieron los trámites para el traslado. (El avión sanitario) iba a salir a la mañana, pero está demorado", dijo esta mañana en diálogo con LV12. Y agregó: "estaba absolutamente pautado el traslado desde ayer a la tarde".

Figueroa de Emilio, no obstante, desmintió al funcionario y aseveró que no fue notificada. "Yedlin ni me llamó. Tengo testigos, porque estoy con gente permanente. Mi hijo tendría que haber viajado ayer", se quejó, desde el aeropuerto.

Luis María, que vive junto a sus padres en Lomas de Tafí, ingresó días atrás al Hospital Avellaneda por una descompostura y fue derivado al Hospital de Niños el domingo a la noche. Tras una serie de estudios los médicos observaron una elevada cantidad de glóbulos blancos. Posteriormente confirmaron que padece leucemia.

De acuerdo a la versión de Figueroa de Emilio, de 28 años, la derivación a Buenos Aires se tramitó ayer con celeridad, pero no tenían cómo viajar hacia allá. "Los médicos del avión nos atendieron muy bien, y el bebé llegó muy estable a Buenos Aires. No eran médicos de Tucumán, sino de Buenos Aires", concluyó la mamá de Luis María . LA GACETA